ROMA, 3 May. (EUROPA PRESS) -
El ex primer ministro italiano Silvio Berlusconi ha generado una nueva división en las filas del recién creado Gobierno de unidad de Enrico Letta, esta vez de forma indirecta, ya que en el Partido Democrático no creen que sea la persona adecuada para encabezar la Convención para las reformas que el jefe del Ejecutivo prevé crear.
Pese a que la idea de la Convención, que contaría con 75 miembros y un presidente, aún no se ha concretado formalmente, ya han surgido los primeros cruces de declaraciones sobre quién podría ocupar su presidencia, después de que el propio Berlusconi se ofreciera para ello. Según 'La Stampa', 'Il Cavaliere' ha indicado a los suyos que le gustaría que su nombre quedara ligado a la reforma de la Constitución.
Sin embargo, en las filas del Partido Democrático (PD), al que pertenece Letta, no opinan lo mismo. El viceministro de Economía, Stefano Fassina, ha defendido hoy que hace falta "una figura capaz de dar garantías a todas las fuerzas políticas representadas en el Parlamento y me temo que el senador Berlusconi no esté entre ellas".
Tampoco el alcalde de Florencia, Matteo Renzi, una de las figuras emergentes en el partido y la política italiana, ve a Berlusconi en ese puesto. "No es que podamos conseguir transformarlo en un padre constituyente", ha aseverado.
Desde el Pueblo de la Libertad se han apresurado a salir en defensa de su líder. Su 'número dos' en el Senado, Giuseppe Esposito, ha defendido que "a la luz del resultado electoral de sustancial paridad" entre centro-izquierda y centro-derecha y dado que "los principales cargos" del país los ocupan miembros del centro-izquierda, "es evidente que la dirección de la Convención" debería ser para el centro-derecha "sin vetos ni condiciones previas de ningún tipo".
En la misma línea se ha pronunciado Fabrizio Cicchitto, recordando que tanto Letta como el presidente de la República, Giorgio Napolitano, proceden del centro-izquierda. "Es equivocado imponer a la Convención condiciones previas 'ad personam'", ha añadido.
Por su parte, el vicepresidente del Senado, Maurizio Gasparri, ha defendido que "a Berlusconi se le reconoce el mérito político de saber representar a millones de italianos" y ha considerado que el PD "se equivoca al plantear condiciones".
