Birmania.- Ex líderes mundiales piden el fin del arresto domiciliario de la Nobel de la Paz Aung San Suu Kyi

Actualizado: martes, 15 mayo 2007 13:25

OSLO, 15 May. (EP/AP) -

Un grupo de 59 antiguos líderes mundiales pidieron en una carta remitida hoy a las autoridades militares de Birmania el fin del arresto domiciliario de la premio Nobel de la Paz Aung San Suu Kyi, retenida bajo custodia de las autoridades de forma intermitente desde 1990, fecha en la que su movimiento pro-democrático, la Liga Nacional para la Democracia, ganó las elecciones por una mayoría aplastante, pero la Junta Militar se negó a reconocer los resultados.

La misiva emplaza a las autoridades militares a no prorrogar el presente periodo de detención de la activista, que concluye el próximo 27 de mayo. "Suu Kyi no quiere una revolución en Birmania, sino un diálogo pacífico y no violento entre el Ejército la Liga Nacional para la Democracia y los grupos étnicos birmanos", afirma la carta, cuya redacción fue coordinada por el Centro Oslo para la Paz y los Derechos Humanos del ex primer ministro noruego Kjell Magne Bondevik.

La carta señala también que la ONU, Estados Unidos, la UE y muchos otros países como Indonesia, Malasia, Singapur, Tailandia o Japón también han pedido la liberación de Suu Kyi.

Entre los firmantes del documento, dirigido al máximo dirigente militar birmano, el general Than Shwe, están tres ex presidentes estadounidenses, George H. W. Bush, Jimmy Carter y Bill Clinton; así como los ex primeros ministros británicos John Major y Margaret Thatcher, el ex primer ministro francés Lionel Jospin, el ex presidente argentino Raúl Alfonsín, el ex presidente brasileño Henrique Cardoso, el ex primer ministro japonés Junichiro Koizumi, el ex presidente chileno Ricardo Froilán Lagos, el ex presidente portugués Mário Soares, el ex presidente polaco Lech Walesa o la ex presidenta filipina Corazón Aquino.

Suu Kyi fue premiada con el Nobel de la Paz en 1991, pero la Junta Militar que gobierna el país desde 1998 la mantiene bajo arresto domiciliario y aplasta cotidianamente a los militantes de su partido.