Birmania.- Miles de damnificados que se refugian en escuelas podrían ser desalojados para celebrar el referéndum

Actualizado: miércoles, 21 mayo 2008 16:10

MADRID, 21 May. (EUROPA PRESS) -

Miles de damnificados por el paso del ciclón 'Nargis' por Birmania podrían ser desalojados de las escuelas en las que se han refugiado para celebrar el referéndum de la nueva Constitución que se tendrá lugar en las zonas afectadas el próximo 24 de mayo.

Françoise Sivignon, responsable de la misión de Médicos del Mundo en Birmania, alertó de que "miles de damnificados refugiados en escuelas van a ser expulsados en los próximos días para dar paso a las mesas electorales para votar el texto de la nueva Constitución".

Según informa la ONG Médicos del Mundo, en Birmania hay dos millones y medio de afectados y sólo el 10 por ciento tiene acceso a la ayuda humanitaria, por lo que pidió la "eliminación inmediata" de los obstáculos para el acceso del personal sanitario a las áreas devastadas.

A pesar de los impedimentos, la organización destacó que ha podido alcanzar la región del delta del río Irrawaddy, la más afectada por el ciclón, y "un equipo compuesto de sanitarios birmanos, los únicos autorizados a desplazarse en estos momentos, interviene desde hace unos días en Kungyangon, localidad con 80.000 habitantes".

"Las principales patologías son las diarreas y las infecciones respiratorias y cutáneas. Desde su llegada a la ciudad, la ONG está instalando refugios y reparte materiales de purificación del agua además de realizar entre 200 y 300 diarias", añade.

Dado que los cooperantes extranjeros "no tienen permiso desde el 12 de mayo para salir de la antigua capital", Rangún, Médicos del Mundo ha contratado a tres médicos y una enfermera birmanos para dar apoyo a las 70 personas del equipo local.

Además, la ONG desplegó clínicas móviles en las localidades de Thanlyin y Dagon. En ambos distritos de la periferia de Rangún las necesidades siguen siendo enormes: el 80 por ciento de las casas están destruidas y los precios de los productos básicos de alimentación y los materiales para la reconstrucción de los tejados se han disparado.