Brahimi quiere dimitir porque cree que el reconocimiento de la Liga Árabe a la oposición compromete su papel

NUEVA YORK 2 May. (Reuters/EP) -

El enviado especial de Naciones Unidas y la Liga Árabe a Siria, Lajdar Brahimi, quiere dimitir porque cree que la decisión de la organización regional de reconocer a la oposición como representante legítimo del país compromete su papel y el de la organización internacional en la crisis siria.

"Está decidido (a dimitir), aunque parece que esperará una semana o así", ha dicho un diplomático de la ONU, bajo condición de anonimato. "Toda la gente implicada (en la crisis siria) quiere que siga en el cargo", ha añadido.

A este respecto, un funcionario estadounidense ha revelado que durante su reunión del pasado lunes en Washington, el secretario de Estado, John Kerry, "reiteró (a Brahimi) el respaldo (de la Casa Blanca) a su misión en Siria, a pesar de las difíciles circunstancias".

Interrogadas sobre los motivos que han llevado a Brahimi a querer dimitir, las fuentes consultadas por Reuters han señalado, principalmente, a la decisión de la Liga Árabe de permitir que la oposición sustituya al Gobierno de Bashar al Assad como representante legítimo de Siria.

"Cree que la Liga Árabe ha tomado una dirección muy distinta a la de Naciones Unidas y a la suya propia, que le impide desempeñar los dos trabajos (como enviado especial de ambas organizaciones)", ha explicado este diplomático.

En segundo lugar, las fuentes han señalado a la frustración de Brahimi por su incapacidad para lograr que las partes lleguen a un acuerdo para poner a fin a la guerra civil, tras dos años de combates y más de 70.000 muertos.

Al parecer, la dimisión de Brahimi es inevitable, pero es posible que después sea nombrado consejero especial para Siria del secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki Moon, lo que le permitiría seguir mediando en el conflicto armado.

En las últimas semanas se ha especulado mucho con la dimisión de Brahimi. El pasado 19 de abril, el diplomático argelino negó que lo hubiera hecho, pero admitió que piensa en ello "todos los días". "Un día quizá lo haga", señaló.

Brahimi fue designado enviado especial de Naciones Unidas y la Liga Árabe a Siria el pasado 17 de agosto, después de que el ex secretario general Kofi Annan dimitiera por el fracaso de su plan de paz, que fue abiertamente incumplido por el Gobierno y los rebeldes sirios.