Burundi.- Al menos 26 muertos en enfrentamientos entre facciones rebeldes rivales

BUJUMBURA 4 Sep. (EP/AP) -

Al menos 26 personas ha muerto en los enfrentamientos entre facciones rivales de las Fuerzas Nacionales de Liberación (FNL), un grupo armado rebelde, en las inmediaciones de la capital de Burundi, Bujumbura.

Godeship Ntakirutimana, un portavoz de la facción del FNL que asegura que fue atacada, explicó que 400 de sus guerrilleros estaban en barracones cuando hombres armados les dispararon y les lanzaron granadas. Ntakirutimana explicó que 77 combatientes de su facción se rindieron a la Policía hoy martes y ahora están desarmados.

Por otra parte, cientos de familias han abandonado sus viviendas de los suburbios del norte de la capital para huir de los combates, los peores que vive el país desde hace cuatro años, según informa la agencia de noticias de la ONU, IRIN.

"Los combates ocurrieron en Mugaruro, donde una de las alas del FNL se opone a (Agathon) Rwasa --el líder del FNL-- se había guarnecido en un pequeño bosque", explicó ayer el administrador de la comuna de Buterere, Noise Ndayisenga.

Otros testigos dieron cuenta de intensos combates y explosiones en los alrededores de la capital. También vieron cuerpos en algunos arbustos desde primera hora de la mañana de hoy.

Ndayisenga afirmó que los vecinos y autoridades locales ya habían pedido a las facciones del FNL que se apartaran de la zona a pesar de que están esperando celebrar una asamblea de desmovilización o integración en las fuerzas armadas.

"Desde el 18 de agosto, hemos dicho en varias ocasiones que no queremos ningún grupo armado en nuestra comuna, pero nuestro llamamiento ha sido ignorado, y este es el resultado", declaró.

Algunos vecinos acusaron a los combatientes de acosarles. "A menudo nos golpean y roban nuestras propiedades. Necesitamos fuerzas que nos protejan para que no nos quedemos entre dos fuego", afirmó un vecino.

La semana pasada, el FNL se escindió en dos ramas. Una de ellas acusa al líder del FNL, Agathon Rwasa, de no haber sido sincero en la puesta en práctica del acuerdo de alto el fuego permanente firmado con el Gobierno en septiembre de 2006 y apuesta por su rápida aplicación.