China.- Un abogado chino es secuestrado y apaleado por defender a sus clientes de los abusos policiales

BEIJING, 3 Oct. (De la corresponsal de EUROPA PRESS, Débora Altit) -

Un abogado residente en Beijing, conocido por defender a clientes conflictivos para el régimen chino, denunció hoy que fue secuestrado y apaleado durante horas por unos sujetos no identificados como castigo por aceptar casos de corrupción oficial y abusos policiales.

Según el letrado, Li Heping, los hechos tuvieron lugar el pasado sábado, cuando tras salir de su oficina fue forzado por varios hombres a entrar en un automóvil y conducir a un lugar que no pudo identificar, donde fue retenido durante cinco horas y golpeado con puños y bastones eléctricos.

"Me decían, vosotros, los abogados de fuera, estáis creando problemas en Beijing y haciéndola inestable", afirmó Li, que entre su cartera de defendidos incluye a un miembro del --denostado por el Gobierno-- grupo espiritual Falun Gong, el abogado ciego Chen Guangcheng (que sacó a la luz las esterilizaciones y abortos forzosos llevados a cabo en la provincia de Shandong) y varios campesinos acusados erróneamente de asesinato.

La paliza a Li habría tenido lugar coincidiendo con la detención de Lu Gensong en Hangzhou (este). Lu, que había denunciado también casos de corrupción local, ha sido acusado de intentar subvertir el poder.

Además, el fin de semana pasado se produjo también la detención del hijo y del hermano de Ye Guozhu, un residente de Beijing que fue expropiado en un terreno destinado a las instalaciones de las Olimpiadas de 2008, que denunció su caso y que se encuentra cumpliendo una condena de cuatro años por "perturbar el orden público".

El Gobierno chino ha endurecido su respuesta contra todos aquellos, ya sean activistas como reporteros o ciudadanos corrientes, que con su disensión parecen poner en peligro el estado de "armonía social" defendido por el actual presidente, Hu Jintao. Las acciones se han intensificado especialmente en las últimas semanas, ante la cercanía del próximo congreso del Partido Comunista (se inaugurará el día 15), en el que se marcará la política y se designará a los nuevos gobernantes de los próximos cinco años.