PEKÍN, 22 Feb. (Reuters/EP) -
Las autoridades chinas contemplan el cierre en 2016 de un millar de minas de carbón, capacitadas para extraer unos 60 millones de toneladas, como parte de su iniciativa para combatir la sobreproducción de un sector, el carbonero, cuyos índices de peligrosidad laboral en China son de los más altos del mundo y responsable de buena parte de la polución en los núcleos urbanos.
La Administración Nacional de la Energía ha anunciado en su web el cierre de las minas y ha recordado sus planes para recortar el exceso de producción de carbón hasta en 500 millones de toneladas de los próximos tres a cinco años.
El carbón satisface más la mitad de la demanda energética del país: se calcula que China consume anualmente 3.700 millones de toneladas que son el origen de la nube de polución que ha pasado al imaginario colectivo cuando de las ciudades del país se trata.
Con la reducción del número de toneladas de carbón, China espera reducir en medio millón de toneladas la emisión de polvo, en 600.000 toneladas la emisión de dióxido de sulfuro, según el plan del Ministerio de Industria dado a concer el año pasado.
