China.- Una protesta a favor de la libertad de prensa en Beijing termina con una quincena de periodistas retenidos

Actualizado: lunes, 6 agosto 2007 16:25

BEIJING, 6 Ago. (de la corresponsal de EUROPA PRESS, Débora Altit) -

Una protesta pública organizada hoy por la ONG Reporteros Sin Fronteras (RSF) para protestar por la falta de libertad de prensa en China, a apenas un año de la celebración de los Juegos Olímpicos de Beijing 2008, terminó con una quincena de periodistas retenidos, cuatro de ellos españoles, durante cerca de dos horas.

En la pequeña manifestación, compuesta por el español Fernando Castello, presidente de Reporteros Sin Fronteras en España, Rubina Möhring, vicepresidenta de la ONG, Robert Ménard, secretario general, y Vincent Brossel, jefe para Asia y celebrada frente a la torre de oficinas del comité organizador de los JJOO en un Beijing inundado por la lluvia, los manifestantes denunciaron las promesas de mayor apertura incumplidas por el Gobierno chino, así como la falta de presión realizada por parte del Comité Olímpico Internacional (COI).

Los miembros de la ONG, que vestían unas camisetas negras en las que los aros olímpicos habían sido sustituidos por esposas y desplegaron carteles con idéntico motivo, insistieron en que su propósito no es arruinarle a China los Juegos, sino defender la libertad de expresión.

"No hemos venido aquí para pedir un boicot. Estamos pidiendo logros concretos, la liberación de presos, un acceso a Internet y el fin de las interferencias radiofónicas", declaró Vincent Brossel.

Según los datos de la organización, en China existen más de 30 periodistas detenidos y otra cincuentena de "ciberdisidentes" (activistas que utilizan Internet para manifestar su oposición al régimen de Beijing) en prisión. Y la promesa realizada por los líderes chinos en 2001, cuando aseguraron que de convertirse en anfitriones de las Olimpiadas mejorarían la situación de los Derechos Humanos en el país ha caído, según esta ONG y otros activistas, en el baúl del olvido.

"El presidente del COI tiene ahora un año para lograr lo que todavía no ha ni tan siquiera pedido: la liberación de los periodistas y ciberdisidentes encerrados, el fin de la censura de Internet, el derecho de los corresponsales extranjeros a moverse libremente por China", señaló Castello.

"Las autoridades chinas han engañado a todo el mundo, incluidos a nosotros cuando vinimos a China en enero pasado. Han hecho promesas que nunca cumplieron", afirmó por su parte Möhring.

La protesta, que se organizó inicialmente en el interior de un centro de oficinas frente al edificio del BOCOG, el comité organizador de los Juegos, por la lluvia, y fue trasladada posteriormente al exterior, terminó con la llegada de una decena de policías, de uniforme y paisano, y la afortunada "escapada" de los miembros de RSF.

La Policía sí retuvo, en plena calle, a gran parte de los periodistas, todos ellos extranjeros, que habían acudido a cubrir el acto, a los que dejó marchar, tras identificarlos, dos horas más tarde.