El Consejo de Seguridad extiende hasta mayo de 2014 el mandato de la UNISFA

NUEVA YORK 26 Nov. (EUROPA PRESS) -

El Consejo de Seguridad de Naciones Unidas ha aprobado este lunes la extensión hasta finales de mayo de 2014 del mandato de la Fuerza Provisional de Seguridad de las Naciones Unidas para Abyei (UNISFA), encargada de supervisar la desmilitarización de la zona, cuya soberanía reclaman Sudán y Sudán del Sur.

La aprobación de la extensión del mandato de la misión, creada en junio de 2011 en respuesta al estallido de violencia provocado por la toma del control de la zona por tropas sudanesas en las semanas posteriores a la independencia de Sudán del Sur, ha sido concedida por unanimidad

En su resolución, el organismo ha solicitado a ambos gobiernos que retomen los trabajos del Comité Conjunto de Supervisión de Abyei "para garantizar el rápido progreso" de la implementación del acuerdo firmado entre ambos países en 2011, que establece las administraciones temporales y contempla la retirada de las tropas de ambas partes.

Asimismo, el Consejo de Seguridad ha pedido a Jartum y Yuba que den los pasos necesarios para garantizar la desmilitarización efectiva de Abyei y que implementen medidas para mejorar la confianza entre las comunidades de la zona.

En este sentido, ha urgido a dichas comunidades que muestren la "máxima moderación" en todas sus interacciones y que eviten llevar a cabo "actos incendiarios" o hacer declaraciones que pudieran desembocar en enfrentamientos.

La pertenencia de Abyei, que dispone de ricos pastos para la ganadería y pequeñas reservas de petróleo, continúa sin haberse decidido desde que Sudán del Sur declarase su independencia de Sudán. En la actualidad continúa siendo uno de los puntos conflictivos en la relación de ambos países.

Abyei fue uno de los campos de batalla de la guerra civil entre el Gobierno de Sudán y el sur, que duró más de dos décadas hasta que se alcanzó el acuerdo de paz de 2005. La región tiene un significado emocional, simbólico y estratégico para ambos países.

El acuerdo de paz contemplaba un referéndum a su población sobre su pertenencia, pero la organización de la votación se ha estancado por los continuos debates sobre si la tribu misseriya tiene derecho a votar.