SEÚL, 15 Dic. (EUROPA PRESS) -
Los más de diez millones de litros vertidos por el superpetrolero 'Hebei Spirit' siguen extendiéndose hacia el sur de la zona del accidente de la semana pasada mientras prosiguen las tareas de limpieza de la mancha negra con la colaboración de la ayuda internacional, en especial de Estados Unidos y de Japón.
A pesar de los esfuerzos para controlar el derrame, tanto las playas de la isla de Anmyeon como parte del parque marino de Taean están comenzando a sufrir el efecto de las llamadas "bolas de crudo": petróleo solidificado que aparece cuando los elementos más volátiles del crudo se evaporan en el aire. Estas "bolas de crudo" se acumulan en el lecho oceánico, matando al plancton, a los peces y las algas que residen en el fondo.
El aire frío y los fuertes vientos que azotan la región han contribuido a disparar aún más la mancha, que sigue extendiéndose a pesar de la labor de los efectivos de limpieza: cerca de 25.000 policías, soldados y voluntarios, a los que acompañan más de 200 barcos y trece aviones, hoy en su octavo día de trabajo. De momento se ha recuperado sólo una décima parte del aceite vertido el pasado viernes.
Esta semana, cuatro expertos en descontaminación enviados por el servicio de Guardacostas estadounidenses llegaron a Corea del Sur el jueves para visitar las zonas de vertido. Por su parte, Japón ha ofrecido cerca de 10 toneladas de material absorbente de crudo, según informó el Ministerio de Defensa surcoreano a la agencia de noticias Yonhap.
China, con dos barcos cargados de material de limpieza; la Agencia de Respuesta Limitada de Singapur con un avión, así como ocho miembros de un equipo de investigación medioambiental de la Unión Europea, harán acto de presencia en el lugar a lo largo de este fin de semana, según las mismas fuentes ministeriales.
