SEÚL, 3 Ene. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno de Corea del Sur ha levantado la prohibición temporal que impedía que los ciudadanos de este país viajasen a Corea del Norte y que se impuso tras el fallecimiento del máximo dirigente norcoreano, Kim Jong Il.
El Ejecutivo suspendió todas las visitas al país vecino el pasado 19 de diciembre, después de que Pyongyang anunciara que Kim había muerto al sufrir un infarto a los 69 años de edad el pasado 17 de diciembre. Los surcoreanos solo podían ir al parque industrial intercoreano situado en la ciudad fronteriza de Kaesong.
Puesto que los dos países están teóricamente en guerra porque la Guerra de Corea (1950-1953) no finalizó con un tratado de paz, sino con un armisticio, los surcoreanos que quieran viajar al Norte deben pedir permiso a las autoridades.
"Dado que el periodo de luto por el presidente Kim ha terminado, actuaremos como corresponde cuando los civiles soliciten visitar Corea del Norte", ha informado este martes un responsable del Ministerio de Unificación, según la agencia de noticias surcoreana Yonhap. El periodo de luto duró trece días.
Sin embargo, las visitas seguirán estando restringidas como consecuencia de las sanciones que impuso Seúl a Pyongyang tras el hundimiento de un barco de guerra surcoreano por un ataque del Ejército norcoreano en marzo de 2010. En aquel incidente murieron 46 marinos surcoreanos, pero Pyongyang asegura que no tuvo nada que ver.
Desde entonces, el Gobierno surcoreano solo permite que viajen al Norte organizaciones no gubernamentales de ayuda humanitaria y figuras religiosas y del mundo de la cultura.
MULTITUDINARIA CONCENTRACIÓN EN COREA DEL NORTE
Mientras, en la provincia de Hamgyong del Sur, en el este de Corea del Norte, ciudadanos norcoreanos y miembros del Partido de los Trabajadores han participado este martes en una multitudinaria concentración en la que se han comprometido a seguir las recomendaciones contenidas en un editorial conjunto que publicaron los tres principales periódicos norcoreanos el día de Año Nuevo.
En la concentración se ha leído una carta para animar a los trabajadores de todo el país a apoyar a Kim Jong Un --el hijo menor y sucesor de Kim Jong Il--, que está liderando "la causa revolucionaria sagrada" que defendieron su padre y su abuelo, Kim Il Sung, el fundador de la República Popular Democrática de Corea, según la agencia de noticias oficial norcoreana, KCNA.
KCNA ha subrayado que "Kim Jong Un es el líder supremo del partido, el Ejército y el pueblo" porque "ha heredado las ideas, el liderazgo, las capacidades, la personalidad, las virtudes, el coraje y el valor de Kim Jong Il".
"Con el querido y respetado Kim Jong Un al frente de la revolución coreana, (...) podremos construir una nación socialista próspera, como siempre desearon Kim Il Sung y Kim Jong Il", ha añadido.
