El "rey de Baviera" dejará la presidencia de este 'Land' y la jefatura de la CSU, formación 'hermana' de la CDU de Merkel
BERLIN, 18 Ene. (de la corresponsal de EUROPA PRESS, Rosa Aranda) -
Edmund Stoiber, presidente del partido bávaro de la Unión Cristiano Social (CSU), hermana de la CDU de Ángela Merkel, y primer ministro de Baviera desde hace 14 años, ha dimitido esta tarde de todos sus cargos, y con ello ha puesto punto y final a las especulaciones que desde hace una semana se hacían sobre el futuro de la unión socialcristiana.
El político bávaro, uno de los máximos representantes del poder conservador en Alemania, ha cedido así a las numerosas presiones internas y ha confirmado que no se presentará como candidato de la CSU a las próximas elecciones del Parlamento bávaro.
"He tomado esta decisión porque para mí es importante actuar rápido por Baviera y por la CSU", dijo Stoiber, quien añadió que lo principal es "que este estado federado siga siendo el más próspero de Alemania". Por ello, Stoiber se retira de ambos puestos que ha ejercido durante muchos años y que le ha llevado a ser calificado en varios círculos como el "rey de Baviera".
LOS SUCESORES
Stoiber añadió que en el congreso de la CSU que tendrá lugar en septiembre se elegirá "al presidente del partido y al cabeza de lista para las próximas elecciones regionales" y anunció que mañana mismo convocará a las delegaciones del partido en Munich y en Berlín para debatir la formación de una nueva directiva en la CSU.
Pese a estas declaraciones, según las informaciones de prensa, esta mañana la CSU, socio en la "gran coalición" del Gobierno germano, habría llegado a un acuerdo por el cual Guenther Beckstein, ministro de Interior de Baviera, de 63 años, pasaría a ser el jefe del gobierno bávaro, mientras que el ministro de Economía, Erwin Huber, de 60 y uno de los preferidos de Stoiber, sería el presidente de la CSU.
Sin embargo hay más candidatos que podrían llegar a formar la cúpula del partido hermano de la CDU de Merkel. Uno de ellos, el favorito en Berlín, es el actual ministro alemán de Consumo y Agricultura, Horst Seehofer, cuya fama sin embargo se vio salpicada este martes cuando el diario sensacionalista 'Bild Zeitung' hacía pública la supuesta relación del ministro, casado y con hijos, con una asistente científica del Bundestag.
También se especula con Joachim Herrmann, presidente de la fracción parlamentaria en el "Landtag" de Baviera; con Alois Glueck, presidente del mismo "Landtag"; y con Michael Glos, ministro federal de Agricultura y Consumo como posibles sucesores de Stoiber.
CONFUSIÓN SOBRE EL FUTURO DE LA CSU
Stoiber ha sufrido durante los últimos días y principalmente durante esta última semana la pérdida de apoyo de su propio partido y por ello, estos días, en Baviera y en Alemania reinaba una confusión total respecto al futuro del partido socialcristiano, que siempre ha gobernado por mayoría absoluta en Baviera, uno de los 'Laender' más ricos del país.
La confusión mayor aparecía esta mañana, pues algunas agencias de noticias alemanas daban por seguro que la crisis histórica por la que pasa la CSU había terminado y que el partido se había puesto finalmente de acuerdo decidiendo que el actual ministro del interior de Baviera, Guenther Beckstein, sería el jefe del gobierno bávaro, mientras que el ministro de Economía, Erwin Huber, asumiría la presidencia de la CSU.
La CSU sin embargo, negaba estas informaciones y aseguraba que aún no se había tomado ninguna decisión, que "no se daría ningún paso sin contar con Stoiber", y que habría que esperar hasta el lunes para que Stoiber revelara sus planes.
CRISIS HISTÓRICA EN LA CSU
El político, de 65 años y perdedor de las elecciones a la Cancillería frente a Gerhard Schroeder en 2002, anunció el martes que no permitiría que nadie le impusiera un plazo para decidir si se presenta de nuevo o no a las elecciones de su partido en 2008. Según sus palabras, parecía decir que no lo permitiría ni siquiera, si la presión era tan grande y si la situación de su partido era tan extremadamente crítica.
Ayer mismo se anunciaba que Stoiber salvaba su puesto porque la cúpula del partido socialcristiano había decidido, después de dos días de reuniones intensivas en el Balneario de Wildbad Kreuth (Alpes bávaros), esperar hasta septiembre para decidir quién será su candidato para las próximas elecciones de 2008.
La crisis para Stoiber comenzó cuando antes de las vacaciones navideñas, Gabriele Pauli, diputada regional de la CSU y crítica con la directiva socialcristiana acusó a Stoiber de impedir que las mujeres tuvieran poder en el partido. Esta dijo a los medios de comunicación que Stoiber pretendía desacreditarla y fue la primera en pedir un relevo generacional en el partido bávaro.