Crónica EEUU/Irán.- EEUU pone enormes trabas a la concesión del visado para los reformistas iraníes, según Time

Actualizado: domingo, 4 marzo 2007 13:05

MADRID, 4 Mar. (EUROPA PRESS) -

A pesar de que la administración Bush ha afirmado en repetidas ocasiones su intención de respaldar la democracia en Irán, la revista Time señala que Washington se ha negado a conceder visados a varios activistas prodemocráticos iraníes, entre los que se encuentra, por ejemplo, Abdolkarim Sorush, considerado como la fuerza intelectual detrás del movimiento reformista que llevó al poder al presidente Jatami en 1997.

Según el magazine, otro de los activistas que no han recibido garantía de visado es Ebrahim Yazdi, director del Movimiento por la Libertad de Irán. A pesar de estar sometidos a una intensa presión por parte de los radicales alineados con el sucesor de Jatami, el actual presidente iraní Mahmud Ahmadineyad, tanto Soroush como Yazdi intentaron viajar a EEUU para tomar parte en conferencias organizadas por las universidades de Harvard y Stanford.

Soroush, actualmente miembro del Instituto Internacional para el Estudio del Islam en el Mundo Moderno, inserto dentro del campis de Leiden, en Países Bajos, solicitó su visado en la embajada de Berlín, el pasado año 2006, sin resultado alguno. "Todavía no han reespondido a mis correos", señaló.

Por su parte, a Yazdi, farmacéutico, le fue negado el visado que solicitó en la embajada de París en 2005. "(La embajada) No me decía más que tonterías", declaró Yazdi a la revista. "Querían asegurarse de que no me iba a quedar en Estados Unidos. Entonces le dije: 'Señora, soy un iraní de 76 años que ha luchado 60 años por la libertad. Quiero visitar a mis hijos y a mis nietos'. Y aún así, rechazaron darme una respuesta directa", afirmó.

Según fuentes del departamento de Estado norteamericano, "nosotros damos consideración total a las peticiones de visados para viajar por Estados Unidos a todas aquellas personas que lo soliciten, incluyendo a Irán", afirma.

"Estos informes son confidenciales y no podemos hacer comentarios en lo que se refiere a estos dos casos concretos, pero pued decir que hemos avisado a estos dos caballeros de que hemos recibido o recibiremos, y después procederemos a procesar aquellas solicitudes apropiadas para la clase de viaje que deseen realizar. La ley federal requiere que se complenten procedimientos de seguiridad antes de que podamos aprobar visados a aquellos viajeros que proceden estados que financian el terrorismos", señaló el portavoz del Departamento de Estado.

Casos como Yazdi y Soroush no son aislados: según algunos reformistas iraníes, creen que los "elementos radicales" de la administración Bush podrían estar denegando las peticiones de visados por "motivos políticos", y tienen la sensación de que "no se pone especial énfasis en alentar el diálogo con los reformistas iraníes, o con cualquier iraní en general", según la publicación.

Además, ciertos grupos iraníes temen que la administración Bush pueda no estar interesada en dar una plataforma a sus ciudadanos que viven en Estados Unidos si se oponen a la visión del presidente estadounidense.

La situación es aún más extraña si se tienen en cuenta los antecedentes de ambos hombres, los cuales han sido cordialmente invitados en el pasado a pisar suelo estadounidense. Soroush, por ejemplo, ha sido calificado como el "Martin Luther del Islam" por sus escritos que defienden la separación entre religión islámica y estado, y fue profesor en la universidad de Harvard y Princeton

Por su parte, Yazdi, cuyo grupo afirma que su objetivo es "la libertad, independencia y democracia de la nación iraní a través de la interpretación moderna de los principios islámicos" residió en estados unidos desde 1956 hasta 1978 durante el reinado del Sha.

La administración ha realizado una notable excepción en el caso del periodista iraní Akbar Ganji, que visitó Estados Unidos en dos ocasiones el pasado año. Sin embargo, Ganji fue elevado a la categoría de símbolo por la administración estadounidense tras pasar más de seis años en prisión por enfrentarse al régimen islámico. En mayo de 2005, el entonces subsecretario de asuntos políticos Nicholas Burns señaló a Ganji como "defensor de la verdad". La revista sugiere que haber negado la entrada al reportero "hubiera sido bastante difícil".

Los motivos que la administración estadounidense presenta a la hora de denegar visados de entrada siempre remiten a la sección 212 (f) de la Ley de Inmigración y Naturalización, que prohíbe la entrada a Estados Unidos de personas que puedan resultar perjudiciales a los intereses de Estados Unidos.

Por ejemplo, Cuba suele ser uno de los países más afectados por esta política. El pasado mes de febrero, el Departamento de Estado negó la visa para entrar a Estados Unidos a varios intelectuales y académicos cubanos residentes en la Isla, quienes figuran entre los invitados al evento Cuba-URSS y la experiencia post-soviética, a realizarse en la Universidad de Connecticut entre el 5 y el 7 de febrero.

Otra cláusula empleada en numerosas ocasiones para restringir la entrada de políticos o funcionarios públicos en el país es la 7750 que firmó el presidente George Bush y que identifica a las personas a quienes se les debe impedir el ingreso a esa nación por sus supuestas actividades de corrupción. Caso, por ejemplo, del ex alcalde de Managua, Roberto Cedeño y su toda su familia, según confirmó la agregada de prensa de la Embajada de Estados Unidos en Nicaragua.

Existen tres áreas principales en que los cambios en la política migratoria pueden ser útiles para combatir futuras amenazas terroristas: la emisión de visas e inspecciones en el momento de ingresar al país, el control fronterizo, y la vigilancia dentro del territorio del país. Quizás Estados Unidos deba también prestar especial atención a los estudiantes extranjeros y considerar armonizar las políticas de inmigración y asilo con el gobierno de Canadá, para poder mantener una frontera relativamente abierta entre los dos países.

Estados Unidos controla el ingreso de personas a a su territorio a mediante un sistema centinela automatizado a nivel nacional (National Automated Immigration Lookout System), denominado NAILS por sus siglas en inglés. Dicho sistema contiene los nombres de personas extranjeras que se sospecha pueden representar un peligro para la seguridad del país; pero el uso de nombres falsos, respaldados con documentos falsos, puede engañar al sistema, por lo que se necesita un mejor banco de datos, capaz de asociar no sólo nombres, que pueden cambiarse fácilmente, sino también información biométrica, como huellas digitales y características faciales. Podría ampliarse el contenido de NAILS con información del FBI.

Otra forma de proteger las fronteras es tomar nota de la entrada y salida de todos los visitantes extranjeros. El sistema que actualmente cumple esta función (mediante el formulario I-94) no resulta eficaz para seguir el rastro de posibles delincuentes. Canadá y los estados del norte de EE.UU. se opusieron al rastreo de entradas y salidas, por temor a que su costo y las molestias resultantes afectaran negativamente el desplazamiento de personas por causas laborales, el comercio y el turismo.