La organización denuncia los ataques, el acoso y la manipulación que sufren sus cooperantes en distintos puntos del mundo
MADRID, 27 Feb. (EUROPA PRESS) -
La organización médico-humanitaria Médicos Sin Fronteras (MSF) criticó hoy la "pasividad" de la comunidad internacional a la hora de solucionar los "conflictos enquistados" que afectan a varios países del mundo y que obligan a los damnificados a "sobrevivir más como animales que como personas".
Durante la presentación de la Memoria Internacional 2007 de MSF, el director general de la organización en España, Aitor Zabalgogeazkoa, explicó que actualmente existen "unos ocho o diez conflictos enquistados" que duran ya "muchos años", lo cual "demuestra la poca intención del sistema internacional de solventarlos".
"El nivel de sufrimiento físico y psicológico" de la población en Chechenia, Sri Lanka, Somalia, Colombia, Darfur (Sudán) o República Democrática del Congo (RDC) no se corresponde con "la dignidad del ser humano", añadió.
Esta situación es la que afecta a RDC, donde MSF ha visto "gente que sale desnuda de la selva". Se trata de personas afectadas o desplazadas por el conflicto que llevan varias semanas escondiéndose. "Viven en condiciones de la edad de piedra", afirmó. Además, los Mai Mai y otras milicias tienen en las zonas que controlan a "miles de personas trabajando en condiciones de esclavitud".
En este contexto, Zabalgogeazkoa denunció que "las consecuencias humanitarias de un conflicto simplemente se ignoran". "Mientras los responsables directos de estas guerras afianzan sus posiciones mediante la violencia directa o indirecta, la comunidad internacional sigue sin dar una respuesta eficaz a estos desastres, bien por falta de voluntad política, por intereses contrapuestos o por escasez de fondos", agregó.
El director de MSF en España puso como ejemplo el caso de Angola, donde "el coste humanitario queda supeditado a los esfuerzos para estabilizar el país", por lo que existen campos de refugiados que más bien son "campos de concentración".
ATAQUES CONTRA MSF
Por otro lado, Zabalgogeazkoa hizo especial hincapié en los ataques de los que son objeto los cooperantes de MSF en varios lugares del mundo. En este sentido, dijo que las organizaciones humanitarias son "atacadas", "acosadas", "manipuladas" y no se respetan las normas que las protegen.
A su juicio, este hecho responde a una tendencia creciente a "atacar al actor más desprotegido", al actor neutral. Los autores de estos asaltos no son sólo las distintas milicias, sino también las fuerzas de seguridad de cada país.
El hecho de que en muchos sitios se identifiquen los objetivos de las organizaciones humanitarias internacionales con la "agenda internacional" y se conciba a estos grupos como una "presencia extranjera" hace que sufran un "desprecio" que conduce a la violación del Derecho Internacional Humanitario que avala y protege su labor.
Zabalgogeazkoa aseguró que "el balance de 2007 es muy malo" para MSF y precisó que durante ese año se registraron "más de 200 incidentes de cierta gravedad", citando secuestros, retenciones, amenazas de muerte o asaltos armados.
Recordó el asesinato de tres cooperantes en Somalia y de otra trabajadora en República Centroafricana, así como el secuestro de otras dos cooperantes en Somalia y varios ataques en Darfur y Sur de Sudán. "Se está convirtiendo en algo habitual", lamentó.
Ante esta situación, el director de la organización en España declaró: "Asumimos en nuestro quehacer diario los riesgos derivados de la propia naturaleza de estos contextos violentos, pero lo que no aceptamos es ser el blanco de estrategias deliberadas de acoso o ataque ni que éstas queden impunes". Por ello, hizo un llamamiento para que "acabe la impunidad".
Respecto a la posibilidad de que alguna fuerza salvaguarde el trabajo de MSF, aclaró que la organización no suele contar con "protección armada" excepto en algunos casos concretos porque considera que es "incompatible" con la labor que realiza.
Así, MSF se ha visto obligada a abandonar sus actividades en Afganistán --trabajando en una zona periférica, en regiones tribales--, a abandonar los equipos de Irak y a plantearse la opción de salir de Somalia.
ACTIVIDADES DE MSF EN 2007
Entre mediados de 2006 y mediados de 2007, MSF prestó asistencia a 9,6 millones de personas en 60 países, con medio millón de pacientes hospitalizados, 190.000 niños en programas de nutrición, 64.400 intervenciones quirúrgicas, 100.000 consultas individuales o sesiones en grupo de salud mental, 11.000 víctimas de violencia sexual atendidas y 89.000 enfermos de cólera tratados.
No obstante, Zabalgogeazkoa reconoció que la organización no ha sido "exitosa" en algunos ámbitos, como el intento de lograr, a través de un tratamiento, que las madres no transmitan el VIH a sus hijos; en la utilización de vacunas adecuadas que sirvan para la prevención de las enfermedades; y en la lucha contra la tuberculosis resistente y extrarresistente a los medicamentos.
La tuberculosis afecta a más de 40 países, pero los métodos de diagnóstico y tratamiento son "del siglo pasado". Asimismo, recalcó que MSF necesita "más herramientas, sobre todo médicas, para llegar a la población".
Además, el director de MSF en España criticó las numerosas "trabas" que ponen algunos gobiernos, como el de Zimbabue, al trabajo de MSF. En su opinión, esta actitud del Ejecutivo, reacio a "ayudar a su población", "no tiene excusa".
En el país africano es especialmente grave la generalización del virus del VIH, que afecta también al sector de la población de cero a doce años de edad, el cual no ha contraído el VIH/sida por contagio. El sida también es uno de los principales problemas en Botsuana o Zambia.
Etiopía, Darfur o Sri Lanka son otras zonas donde las exigencias administrativas complican la atención médica a la población, teniendo que esperar varios meses hasta conseguir permisos, vehículos o gasolina.
Por último, Zabalgogeazkoa recordó que existen una serie de "enfermedades olvidadas", como la enfermedad de Chagas, la tuberculosis, o algunas enfermedades tropicales. El problema en estos casos es que tanto los métodos de diagnóstico como los de tratamiento están "obsoletos" porque son afecciones que hace tiempo que dejaron de afectar al mundo desarrollado o que nunca lo han hecho. Por consiguiente, el director de MSF en España pidió "que se invierta en investigación y desarrollo".
Otras enfermedades contra las que trabajan los cooperantes de MSF son el cólera, el VIH/sida, la tripanosomiasis humana africana (enfermedad del sueño), la leishmanianis (kala azar), la malaria o la meningitis.
El 73 por ciento de los gastos de proyectos de MSF durante 2007 se destinaron a África, y los países en los que más fondos empleó fueron Sudán y RDC. La mayor parte de los ingresos de la organización provienen de fondos privados.
