Los ataques con mortero y cohetes provocan el cierre de los pasos por parte de Israel
JERUSALEN, 16 Sep. (EUROPA PRESS) -
Los ataques con cohetes y fuego de mortero desde la Franja de Gaza contra el norte de Israel están afectando directamente a la población palestina, puesto que el Gobierno israelí ha decidido como represalia cerrar las fronteras en la zona y, con ello, impedir la llegada de toneladas de ayuda humanitaria, según informa la agencia de noticias de Naciones Unidas (IRIN).
El ejemplo más reciente es el del paso de Kerem Shalom, cerrado durante cuatro días el pasado agosto --según la OCHA, la Oficina de Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios--. Este bloqueo sirvió al Ministerio de Defensa israelí para advertir de que la amenaza de nuevos ataques le impide, por motivos de seguridad, proseguir con los envíos de ayuda.
"No podemos mantener el paso abierto si nos encontramos bajo el fuego", declaró un alto funcionario del Ministerio de Defensa, Shlomo Dror. "En el paso de Kerem Shalom trabajan 200 personas a las que tenemos que proteger", recordó.
Los oficiales israelíes afirman que todas las semanas alguno de los pasos queda cerrado por los ataques efectuados desde Gaza. También han sido objeto de numerosos ataques las principales oficinas del Ejército situadas en el paso de Erez.
BLOQUEO DE LA FRANJA DE GAZA
Desde la toma de poder efectuada el pasado junio por el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) en la Franja de Gaza, los pasos fronterizos sólo se han abierto para dejar transitar bienes esenciales como alimentos o medicinas.
Las exportaciones han quedado prohibidas y la supervivencia de las principales empresas de Gaza peligra, ya que el 76 por ciento de sus productos se fabrican para su exportación al extranjero, según el director ejecutivo de la Federación Palestina de Industrias en Gaza, Amer Hamad.
Por su parte, Israel argumenta que es incapaz de coordinar con Hamás la llegada de alimentos y bienes de primera necesidad, dado que las milicias afines al Movimiento están detrás de los ataques y la propia organización se encuentra en pie de guerra contra el Estado hebreo.
Por todo ello, explicó Hamad a IRIN, "la economía palestina se encuentra al borde del hundimiento, porque más del 90 por ciento de los empleos en la industria ha desaparecido desde el pasado mes de junio".
ECONOMÍA Y FRONTERAS
En cuanto a la importación de alimentos y bienes de primera necesidad en Gaza, los observadores internacionales y los oficiales de seguridad israelíes atribuyen los problemas sufridos en agosto a dos factores: por un lado, el deterioro de la economía ha dejado a los palestinos sin poder adquisitivo y, por otro, los ataques sobre los pasos limitan las horas de apertura para el paso del material.
El lanzamiento de cohetes ha sido esgrimido por Israel como principal argumento para el cierre de los pasos fronterizos. "No creo que Israel necesite una excusa para cerrar los pasos", afirmó Hamad, antes de reclamar que los empresarios palestinos sigan "jugando un papel importante".
Hamad aseguró que los empresarios palestinos rechazan los ataques contra los pasos fronterizos. "Todos aquellos que nos encontramos en la comunidad de empresas nos oponemos al lanzamiento de cohetes cerca de los accesos, o contra los accesos mismos", denunció el director.
Ahora, el principal temor en ambos lados es que los ataques continuos en los pasos de Sufa y Kerem Shalom terminen obligando a cerrar los accesos de forma indefinida. Es más, aunque sólo se cerrara el paso de Sufa, las consecuencias serían "extremadamente severas", ya que "Kerem Shalom carece de capacidad para cubrir las necesidades mínimas de la población de Gaza", afirmó un miembro del Programa Mundial de Alimentos (PAM), Kirstie Campbell.
Otro asunto que genera numerosos problemas es el gasto que para el PAM supone no poder utilizar el paso de Karni y, por tanto, verse obligada a desviarse por el acceso por Sufa, que es dos veces más caro.
La situación puede ser aún peor, ya que si Sufa se cierra el PAM deberá recurrir al paso de Kerem Shalom, tres veces más caro. Además, si los pasos se mantienen cerrados durante un día entero, el PAM y otras organizaciones dependientes de la ONU deben pagar comisiones especiales de almacenamiento de mercancías.
