Crónica O.Próximo.- Al Fatá afirma que no dialogará más con Hamás, al que tildó de asesino "a sangre fría"

Actualizado: viernes, 5 enero 2007 21:04

Muere un octavo guardaespaldas del jefe de Seguridad Preventiva asesinado ayer por militantes de Hamás GAZA, 5 Ene. (EP/AP) -

El movimiento Al Fatá del presidente palestino, Mahmud Abbas, rechazó hoy la posibilidad de mantener cualquier diálogo con Hamás, acusando al Movimiento de Resistencia Islámica de asesinar "a sangre fría" ayer al jefe de la Seguridad Preventiva en el norte de Gaza y a seis de sus guardaespaldas, y pese a que previamente, Abbas y el primer ministro Ismail Haniyeh se habían reunido en Gaza y habían acordado la retirada de sus respectivas milicias de las calles.

Al Fatá rechazó cualquier diálogo con Hamás, y acusó a los servicios de seguridad especial del ministro de Interior y miembro de Hamás, Said Siyam, del ataque de ayer, asegurando que no habrá más intentos de reconciliación hasta que los asesinos de la víctima sean llevados ante la justicia.

"No habrá ningún diálogo en la sombra del asesinato y el terrorismo practicado por Hamás", señaló Al Fatá en un comunicado emitido en Gaza. "Said Siyam es responsable de la ejecución y del asesinato a sangre fría al que nuestros mártires en Jabalya fueron sometidos", añadió el texto.

Previamente, el presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abbas y el primer ministro de Hamás, Ismail Haniyeh habían acordado a primera hora de hoy la retirada de sus fuerzas para terminar con la violencia callejera.

Haniyeh prometió "terminar con todos los despliegues armados en las calles", mientras que Abbas no realizó comentario alguno, al término de la reunión en Gaza.

El primer ministro lamentó además los incidentes de ayer "que no se corresponden con nuestra lucha", en los que un alto responsable de los servicios de seguridad palestinos leal a Al Fatá fue abatido en un asalto a su casa por milicianos de Hamás.

El coronel Mohamed Ghayeb estaba hablando por teléfono en directo con la cadena Palestine TV momentos antes de su muerte y pidió ayuda, mientras su casa era bombardeada con cohetes caseros y granadas propulsadas por cohetes.

"Son asesinos", dijo sobre los milicianos de Hamás. "Están atacando la casa, los niños están muriendo, están sangrando, por amor de Dios, enviad una ambulancia, queremos una ambulancia, que alguien se mueva", señaló. Momentos después de la conexión se cortó y según un portavoz de Al Fatá, Tawfiq Abu Jussa, Ghayeb murió, mientras que su mujer resultó gravemente herida en el ataque.

Ghayeb era el responsable del Servicio de Seguridad Preventiva en el norte de Gaza y su asesinato desencadenará con toda probabilidad nuevos actos de violencia de venganza. El enfrentamiento en torno a la casa de Ghayeb en Beit Lahiya comenzó ayer, después de que un miembro de Al Fatá que hacía guardia en un tejado fuera abatido. Posteriormente, Ghayeb y sus partidarios se enfrentaron con milicianos de Hamás.

En relación con este incidente, hoy falleció un octavo miembro de las fuerzas de seguridad palestinas leales a Al Fatá a causa de las heridas que recibió ayer en dicho ataque.

FUNERAL DE GHAYEB

Mientras tanto, miles de palestinos asistieron, bajo la lluvia, a la procesión funeraria de siete activistas del partido Al Fatá que murieron en el enfrentamiento más letal de las últimas semanas en la Franja de Gaza.

Decenas de milicianos de Al Fatá marcharon en la procesión, efectuando disparos al aire y pidiendo venganza contra el grupo rival, el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás), enfrascado en una disputa de poder con Al Fatá por el control del Gobierno palestino.

Cuando la procesión del funeral pasó frente a la casa de Ghayeb, un miliciano enmascarado efectuó disparos al aire y pidió vengar la muerte del comandante de Al Fatá. "La mano que le disparó a él y a sus camaradas será cortada", gritó.

Además, en el día de hoy continuaron los asesinatos. Un líder religioso local que mantenía una postura crítica con el Movimiento de Resistencia Islámica murió tras recibir un disparo efectuado desde un coche, cuando salía de una mezquita de Ciudad de Gaza, según informaron fuentes médicas y testigos.

Por el momento nadie ha reivindicado la responsabilidad de la muerte de Adel Nasar, que fue atacado desde un vehículo aparcado en el exterior de la mezquita. El religioso no pertenecía a ningún partido político, pero frecuentemente criticaba a Hamás en sus sermones.

Mas de 20 personas han muerto en un mes en la Franja de Gaza debido a enfrentamientos entre miembros de las facciones rivales de Al Fatá y Hamás.

CISJORDANIA

Por otra parte en Cisjordania, después de que ayer el Ejército israelí entrara en la ciudad de Ramala y matara a cuatro personas e hiriera a otras 20, hoy la incursión se produjo en Nablús, aunque el saldo fueron tres palestino heridos.

Los tres eran miembros de las Brigadas de los Mártires de Al Aqsa, brazo armado de Al Fatá, y también resultó herido un soldado del Ejército israelí, en enfrentamientos tras una incursión hebrea en la ciudad de Nablús --norte de Cisjordania--.

Las tropas israelíes, apoyadas por varios vehículos militares y escavadoras entraron en la parte vieja de la ciudad provocando enfrentamientos con miembros de la resistencia palestina, que utilizaron artefactos explosivos colocados en las calles contra los vehículos militares hebreos, informa la página web de Hamás, 'Palestine_info.com'.

Los miembros de las Brigadas constataron que un grupo de sus combatientes consiguió destruir un de los vehículos israelíes hiriendo a un soldado. Además, varios testigos señalaron que las tropas hebreas ocuparon los tejados de la casas y las excavadoras causaron daños materiales a las tiendas y comercios de la zona antigua de Nablús. Tres militantes de las Brigadas resultaron heridos en los combates.

Mientras tanto, el la localidad cisjordana de Attel, a cuarenta kilómetros al oeste de Nablús, las tropas israelíes intentaron arrestar a un miembros de Yihad Islámica, al que no lograron encontrar, aunque detuvieron a otras cuatro personas.

Unos 20 vehículos militares entraron de madrugada en la pequeña ciudad en busca de Abdelmo'ti Hasan, que salió de una cárcel israelí hace un mes tras cumplir siete años de condena. Los soldados dispararon a su casa y lanzaron granadas de ruido, tras lo que entraron en el interior para registrar el inmueble. La redada terminó a las 11 de la mañana, hora local, (10.00 hora peninsular española), con las tropas llevándose a cuatro vecinos de Hasan detenidos.