BRUSELAS, 23 Jun. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno español mostró hoy su satisfacción por el compromiso alcanzado con Polonia para retrasar hasta 2017 la plena aplicación del sistema de voto por doble mayoría, el principal escollo para desbloquear las negociaciones del Tratado, informaron hoy fuentes gubernamentales españolas.
España siempre ha defendido que la prolongación del reparto de poder que le otorgaba el Tratado de Niza le beneficiaba, aunque hubiera preferido no haber abierto este debate. "Para España todo lo que sea avanzar en el tiempo (con respecto a la vigencia de Niza) es positivo", señalaron las fuentes.
Zapatero se reunió esta noche al término de la cena de los jefes de Estado y de Gobierno de la UE con el presidente polaco, Lech Kaczynski, el francés, Nicolas Sarkozy, el primer ministro británico, Tony Blair y el luxemburgués, Jean Claude Juncker para encontrar una "salida definitiva" al problema de Polonia.
En este encuentro llegaron a un "principio de acuerdo" que deberá trasladarse a todos los jefes de Estado y de Gobierno reunidos en Plenario y que consiste en retrasar hasta 2017 la plena aplicación del sistema de doble mayoría.
De forma paralela, los representantes de los Gobiernos del llamado Grupo de Amigos de la Constitución se reunieron para analizar la propuesta de mandato de la presidencia alemana para que la presidencia portuguesa redacte un nuevo Tratado. Según las fuentes gubernamentales, estos expertos, que continuaban reunidos, identificaron al menos cuatro puntos que quieren "corregir".
Entre ellos, una de las provisiones que contiene el documento, relativa a cuestiones de moral y que, según indicaron, incluyó Alemania en el último momento como una concesión a Polonia. Para España y el resto de los amigos de la Constitución resulta "inaceptable" y aseguraron que se suprimirá del mandato.
En concreto, el párrafo en cuestión figura en el capítulo relativo a la Carta de Derechos Fundamentales, que sí será vinculante jurídicamente. En una nota a pie de página, se matiza que "la Carta no afecta de ningún modo el derecho de los Estados miembros a legislar en la esfera de la moralidad pública, Derecho de familia y la protección de la dignidad humana y respecto a la integridad moral y humana".
Las fuentes señalaron que España reclamó la "supresión" de estadeclaración como "fundamental" para que aceptase el texto y aceptaron la posibilidad de que Varsovia adjunte una declaración, sin valor jurídico, sobre este aspecto si así lo desea.
Por otra parte, las fuentes subrayaron que el mandato confirma el nombre del Alto Representante de la Unión y que esta figura presidirá los Consejos de Exteriores y será vicepresidente de la Comisión Europea. No obstante, explicaron que se ha añadido una declaración "para la opinión pública del Reino Unido" que puntualiza que esta figura "no afectará a la política exterior de los Estados miembros ni a las representaciones diplomáticas". Sin embargo, remarcaron que esta declaración es meramente política y no jurídica.