BAKÚ, 1 Ago. (Reuters/EP) -
Las autoridades de Azerbaiyán detuvieron el miércoles a la reconocida activista Leyla Yunus, directora del Instituto para la Paz y la Democracia, por presunta traición, espionaje y evasión fiscal, en lo que ha sido descrito como un ataque contra la oposición.
Yunus fue detenida en la capital, Bakú, cuando se dirigía a una conferencia, tras lo que un tribunal azerí ha ordenado que permanezca tres meses en prisión preventiva hasta que se celebre el juicio.
Su marido, Arif Yunus, que es también activista pro Derechos Humanos, fue detenido brevemente cuando acudió a visitarla a la oficina del fiscal. El tribunal le ha impuesto restricciones de viaje.
La Fiscalía ha afirmado este jueves que la pareja está acusada de tener lazos con las fuerzas especiales de Armenia y de haber llevado a cabo actividades de reclutamiento de ciudadanos azeríes para que llevaran a cabo actividades de espionaje.
En 1991 estalló un conflicto militar entre Azerbaiyán y Armenia en Nagorno Karabaj, después de que el territorio, de mayoría armenia, anunciara en 1988 que se separaba de la entonces República Socialista Soviética de Azerbaiyán. Después, en 1991, se anunció la institución de Nagorno Karabaj como república, lo que dio pie a enfrentamientos entre Bakú y Ereván.
El 12 de mayo de 1994 se firmó un armisticio. Como resultado del conflicto, Azerbaiyán perdió el control sobre Nagorno Karabaj y siete distritos adyacentes. Desde 1992 y hasta el presente se mantienen negociaciones sobre el arreglo en el marco del Grupo de Minsk de la OSCE, cuyos copresidentes son Estados Unidos, Francia y Rusia.
Azerbaiyán insiste en la conservación de su integridad territorial. Por su parte, Armenia defiende los intereses de la república secesionista, mientras que la República de Nagorno Karabaj no participa en las negociaciones.
Por su parte, Amnistía Internacional (AI) ha afirmado que los cargos presentados contra Leyla y Arif Yunus "son inventados y forman parte de un proceso de acoso contra ellos". "Leyla Yunus es otra voz independiente de Azerbaiyán a la que el Gobierno ha intentado silenciar a través de amenazas e intimidación", ha remachado Natalia Nozadze, la investigadora de la organización en el país.
