MADRID, 29 May. (EP/AP) -
La decisión de la Administración Bush respecto a la sucesión de Paul Wolfowitz al frente del Banco Mundial podría conocerse esta semana, informó la Casa Blanca.
Estados Unidos ha estado evaluando candidatos durante las últimas semanas para reemplazar a Wolfowitz, quien abandonará la institución el próximo 30 de junio.
"Pienso que estamos muy cerca" indicó Tony Snow, secretario de prensa de la Casa Blanca. Probablemente, el presidente Bush comunique su decisión esta semana, añadió Snow.
La dimisión de Wolfowitz se produjo tras fallar un panel especial del banco que él rompió las normas de la entidad cuando concedió en 2005 un fuerte paquete de compensaciones para su pareja, Shaha Riza, una empleada de la institución. La controversia provocó reacciones de los países europeos, los trabajadores del banco, grupos de ayuda y políticos demócratas, entre otros, reclamando la dimisión de Wolfowitz.
El secretario del Tesoro, Henry Paulson, es el encargado de encontrar un sucesor. La elección del presidente estadounidense debe ser aprobada por el consejo del Banco Mundial.
POSIBLES CANDIDATOS
El anterior vicesecretario de Estado, Robert Zoellick, antiguo director de comercio de Bush, ha emergido en las últimas fechas como uno de los principales candidatos al puesto.
Otros de los nombres que han sonado para el cargo son Robert Kimmitt, el funcionario número dos del Departamento del Tesoro; Stanley Fischer, quien ya trabajó en el Fondo Monetario Internacional (FMI) y actualmente trabaja en el Banco de Israel y el ex presidente de la Reserva, Paul Volcker.
Por su parte, el ex líder de la mayoría republicana en el Senado, Bill Frist, cuyo nombre también había sonado para el puesto, indicó a los funcionarios de la administración que no quería ser considerado para el puesto.
Tradicionalmente, el Banco Mundial ha estado presidido por un estadounidense, mientras el Fondo Monetario Internacional es presidido por un europeo. Los Estados Unidos, el principal contribuyente y mayor accionista de la entidad, pretende mantener esta tradición intacta. Sin embargo, algunos grupos de ayuda y otras voces críticas reclaman el abandono de esta práctica.
