EEUU.- Una familia gallega se salva de la masacre de la Universidad Politécnica de Virginia

Actualizado: miércoles, 18 abril 2007 19:39

El hijo mayor de Antonio Piñeiro estaba en clase en el momento de la matanza

A CORUÑA, 18 Abr. (EUROPA PRESS) -

Antonio Piñeiro todavía intenta reponerse del miedo vivido en las últimas horas después de saber que en la universidad americana donde estudian sus hijos y donde su ex mujer imparte clase de literatura española un estudiante acababa con la vida de 32 personas en la Universidad Politécnica de Virginia, en Blacksburg.

"Han sido unos momentos terribles, pero los estamos superando, aunque nos estamos dando cuenta de que la tragedia pudo ser terrible para esta familia", dijo a Europa Press Televisión este arquitecto de A Coruña que a medida que van pasando las horas se muestra más preocupado por su familia, especialmente por su hijo mayor, Eduardo, que en el momento de la masacre "estaba allí, en el epicentro".

Una angustia que crece entre sus hijos y su ex mujer "porque todavía no saben si entre las víctimas hay compañeros o alumnos"

PRIMERAS NOTICIAS

Antonio Piñeiro se enteró de lo sucedido por su ex mujer, que lo llamó el lunes por la tarde para decirle "que había habido un tiroteo en el campus y que estuviese tranquilo porque ellos estaban bien".

Laura, la ex mujer de Antonio, no tiene clase los lunes, por lo que ese día no estaba en el campus; mientras que su hijo pequeño, Sean, de 21 años, que suele ir a la Politécnica para practicar deporte o tocar el piano, recibió el aviso de su madre por lo que no llegó a ir al campus.

Por su parte, el mayor de los hijos de Antonio, Eduardo Piñeiro, de 22 años, que estudia una carrera interdisciplinar con asignaturas de Químicas y Humanidades, estuvo en clase a las ocho y media de la mañana, después de lo cual "fue a casa, y al cabo de dos hora volvió otra vez a la universidad" ya que le habían dicho que se había producido un tiroteo "pero no le dio importancia".

"A los diez minutos de estar allí es cuando empezó el follón, y él salió de allí para irse pero un policía le dijo que no podía salir y que tenía que volver para clase y quedarse allí", donde estuvo tres horas "viendo la televisión desde debajo de una mesa".

EJECUCIÓN

Según Antonio Piñeiro, entre los alumnos de la universidad "se dice que el asesino primero fue a la residencia a matar a su novia y luego se fue a una clase", donde "atrancó" la puerta con una cadena. "Allí, mató a un profesor, un hombre de 80 años, y luego puso a todos en fila y empezó a ejecutar a los de delante, y los de atrás se metieron debajo de las mesas; algunos se tiraron por las ventanas", después de lo cual, el asesino "cuando creía que estaban todos muertos o heridos salió e hizo lo mismo en otra aula".

La familia de Antonio, le explicó que la policía desalojó la residencia, donde el joven mató a dos personas, "a una muchacha y al responsable de la residencia".

El hecho de que la policía cerrara la residencia pero no la universidad pudo ser "el gran problema" para Antonio, "pero quién se iba a imaginar que esto iba a continuar; eso nunca se sabe; quién iba a pensar que una persona después de matar a dos iba a volver y empezar a hacer una masacre como ésta".

Por último, Antonio Piñeiro nos recuerda que Blacksburg, donde se encentra la Universidad Politécnica, es "un pueblo muy tranquilo, y pequeño, donde la gente es muy educada".