EEUU.- La 'madre coraje' estadounidense Cindy Sheehan abandona su movimiento contra la guerra de Irak

WASHINGTON 29 May. (EUROPA PRESS) -

Cindy Sheehan, la 'madre coraje' que lideró las protestas contra la guerra de Irak tras la muerte de su hijo, ha asegurado que deja su movimiento por la paz, debido a los costes emocionales y financieros que le ha supuesto, en una carta en la que lamenta cómo su hijo murió "por nada", según informó la CNN.

Sheehan acaparó la atención de su país cuando acampó frente al rancho del presidente estadounidense, George W.Bush, en Texas en agosto de 2005, para pedirle un encuentro, tras la muerte de su hijo Casey, de 24 años. Aunque Bush la ignoró por completo, su vigilia se convirtió en uno de los actos más importantes de oposición a la guerra.

Sin embargo, en su diario publicado en internet, Sheehan aseguró que está exhausta por el elevado coste personal, financiero y emocional que han tenido estos dos años de lucha. En su bitácora, afirma que se encuentra desiluisionada por el fracaso de los políticos demócratas a la hora de poner un punto y final a la guerra, y cansada de los movimientos pacifistas, que "con frecuencia ponen sus egos personales por encima de la vida pacífica y humana".

En su carta, Sheehan dice que Casey "en realidad murió por nada". "Desde que murió he intentado darle un sentido a su sacrificio. Casey murió por un país que se preocupa más por quién será el próximo 'American Idol' que por cuántas personas morirán en los próximos meses, mientras demócratas y republicanos juegan a políticos con vidas humanas", señala.

"Es tan doloroso para mí saber que apoyé este sistema durante tantos años, y que Casey pagó el precio por esta lealtad. Fallé a mi hijo y eso es lo que más me duele", dice.

La hermana de Sheehan, DeDe Miller, aseguró a la CNN que la organización que crearon hace dos años continuará trabajando por causas humanitarias, pero no se implicarán en el movimiento antibélico.

En su misiva, Sheehan también advierte de que Estados Unidos se está conviriendo en "una tierra corporativa y fascista" y relata que cuando pidió a los que demócratas, en un tiempo sus aliados, que se responsabilizaran del fin de la guerra, le dieron la espalda.