EL CAIRO, 13 Dic. (EUROPA PRESS) -
El nuevo embajador de Israel en Egipto, Yaakov Amitai, ha llegado este lunes a El Cairo y ha expresado su deseo de que ambos países sigan teniendo unas relaciones pacíficas tras la caída del régimen de Hosni Mubarak, ocurrida el pasado 11 de febrero.
En sus primeras declaraciones ante la prensa, Amitai se ha mostrado contento de trabajar en Egipto durante "este momento histórico", en referencia a la transición democrática que ha iniciado el país. "Gracias a Dios, la revolución egipcia ha tenido éxito", ha dicho, según informa el diario 'Al Masry al Youm'.
Interrogado sobre la repercusión que tendría en las relaciones bilaterales el ascenso de los islamistas al poder, Amitai ha confiado en la fortaleza de las relaciones pacíficas que ambos países han mantenido durante los últimos años.
En este sentido, ha rechazado las declaraciones realizadas por un funcionario israelí, que advirtió de un posible enfrentamiento bélico entre Israel y Egipto. "Mi trabajo es fortalecer la paz entre ambos países y eso es lo que voy a hacer", ha aseverado el embajador.
A su llegada a El Cairo, Amitai ha sido recibido por una delegación del Ministerio de Exteriores de Egipto y por el cónsul de Israel en la capital egipcia, que viajó a Tel Aviv la semana pasada para preparar la llegada del nuevo embajador.
Amitai sustituye a Yitzhak Levanon, que regresó a El Cairo el pasado 10 de noviembre, dos meses después de que una turba atacara la Embajada en respuesta a la muerte de cinco guardias de seguridad egipcios por disparos realizados por soldados israelíes, que perseguían a los responsables de la muerte de ocho compatriotas.
A pesar de la llegada de Amitai a El Cairo, la Embajada no estará en funcionamiento hasta que lleguen los trabajadores de la sede diplomática israelí que, a raíz de dichos disturbios, será reubicada, aunque se desconoce dónde.
Amitai ya trabajó en la Embajada de Israel en Egipto a mediados de la década de 1980. Posteriormente, entre 1989 y 1993, ejerció de embajador en Estados Unidos. Después desempeñó las mismas funciones en Kenia y Etiopía, su último destino, donde ha permanecido tres años.
