ANTANANARIVO, 10 Mar. (Reuters/EP) -
El Ejército de Madagascar dio hoy a los dirigentes del país 72 horas para resolver la crisis política en que se encuentra sumida la isla desde hace semanas y que ha desencadenado disturbios en los que han muerto unas 135 personas, amenazando de lo contrario con una intervención militar.
De hecho, algunos militares malgaches se han amotinado en los últimos días, enfadados por la represión que ha llevado a cabo el Gobierno del presidente, Marc Ravalomanana, de las manifestaciones convocadas por el líder de la oposición, Andry Rajoelina.
"Prometemos permanecer neutrales. Imploramos a los jugadores políticos, a las organizaciones de la sociedad civil y a otras partes que se reúnan inmediatamente para encontrar una solución en el plazo de las próximas 72 horas para ayudar a la nación a salir de la actual crisis", señaló el jefe del Estado Mayor del Ejército, general Edmond Rasolomahandry.
"Si no se encuentra ninguna solución en este plazo, nosotros, las fuerzas armadas, cumpliremos nuestras responsabilidades en el mayor interés de la nación", prometió, sin dar más detalles.
La advertencia se produjo coincidiendo con la noticia de que la ONU tiene protegido a Rajoelina, que teme ser arrestado, y con el anuncio de la dimisión del ministro de Defensa, Mamy Ranaivoniarivo, quien apenas llevaba un mes en el cargo y habría sido presionado por los soldados rebeldes.
Flanqueado por soldados, Ranaivoniarivo leyó su carta de renuncia a la prensa en su oficina. Previamente, un coronel detrás del motín dijo que las tropas disidentes tenían controlado el edificio. "Quizá dimití bajo amenazas. No me gusta que los malgaches se estén matando entre ellos", declaró Ranaivoniarivo posteriormente a Reuters por teléfono, añadiendo que su dimisión era "la mejor solución que se me ocurría".
Su predecesor en el cargo lo abandonó el mes pasado después de que la guardia presidencial abatiera a tiros a 28 manifestantes antigubernamentales.
Rajoelina, ex alcalde de la capital cuyas protestas desencadenaron los peores disturbios en años, se ha distanciado de los amotinados. Anoche, el mediador de la ONU, Drame Tiebile, informó de que Naciones Unidas ha puesto al líder opositor bajo su protección, si bien indicó que Ravalomanana le había dado garantías de que su rival no será detenido.
Rajoelina, de 34 años, ha galvanizado las iras de la población contra el presidente, al que ha pedido en reiteradas ocasiones que dimita, denunciando que ya no controla la capital ni las provincias. El Gobierno, por su parte, le acusa de fomentar el descontento de la población con acusaciones exageradas.
En un mensaje difundido hoy por la radio y la televisión, Ravalomanana, de 59 años, dijo que asumía la responsabilidad de cualquier error que pudiera haber cometido. "Sé que hay personas que están enfadadas conmigo y les entiendo. Estoy dispuesto a escucharos. Prometo tomar los pasos (necesarios) para encontrar una solución", afirmó.
Entretanto, los líderes religiosos que han estado intentando negociar entre los dos rivales prevén mantener tres días de conversaciones a partir del jueves y Ravalomanana ya ha confirmado que asistirá. Por su parte, un ayudante de Rajoelina no confirmó su presencia, afirmando que el líder oposición todavía no ha sido informado oficialmente.
