España/Letonia.- Los dos jóvenes retenidos en Riga reciben autorización para viajar a España

Actualizado: viernes, 15 junio 2007 13:28

Deberán volver "en otoño" a Letonia para la celebración del juicio

MADRID, 15 Jun. (EUROPA PRESS) -

Los dos jóvenes españoles que se encontraban retenidos en Letonia acusados de ultraje a la bandera nacional y robo de banderas tras descolgar unos banderines como recuerdo de su estancia en el país han sido autorizados a abandonar este país y regresar cuando se celebre su juicio, después de que el embajador español en Riga, Emilio Lorenzo Serra, firmara una garantía por escrito de que los jóvenes volverán al país báltico cuando se celebre el juicio.

Según explicó el embajador en declaraciones a Europa Press, el fiscal "aceptó la salida de los dos jóvenes españoles y la de los dos portugueses que también permanecían en Letonia con una garantía por escrito que hemos dado ambos embajadores de que cuando sean convocados al juicio asistirán".

Lorenzo Serra indicó que el juicio se celebrará en "el otoño, problamente entre octubre y noviembre". No obstante, se mostró convencido de que el caso "se va a resolver con una multa" y los dos jóvenes "no volverán a pisar la cárcel" en Letonia.

Miguel Ángel López Beltrán, natural de Huelva, y Edén Galván, de Canarias, se encontraban este mediodía en el aeropuerto de Riga en espera de coger un avión que les lleve a España, indicó el embajador, que aseguró que los dos jóvenes están "muy contentos" por poder volver a España. Los miembros de la representación diplomática española también están "contentos de que se haya prácticamente resuelto" el caso.

El Ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperacion recibió hoy esta informacion a través de la Embajada española en Riga e inmediatamente después el jefe de la diplomacia española, Miguel Angel Moratinos, llamó por teléfono a cada una de las madres de los afectados para anunciarles la noticia.

"RESPUESTA EXCESIVA A UNA CHIQUILLADA"

El embajador se mostró convencido de que "a medida que se hayan calmado las aguas, la racionalidad se habrá restablecido", ya que, en definitiva "ha sido una chiquillada" que ha recibido una respuesta "excesiva" por parte de las autoridades de Letonia, un país joven con una "gran sensibilidad" ante posibles ofensas a sus símbolos.

Los dos jóvenes fueron detenidos junto a otros cinco amigos portugueses el pasado 16 de mayo después de que descolgaran unos banderines letones de unas farolas con el objetivo de llevarse un recuerdo del país. Las autoridades presentaron cargos contra ellos por robo y ultraje a la bandera, aunque días después se puso en libertad a tres de los portugueses, después de que se comprobara que no habían tenido nada que ver con el incidente.

Los otros cuatro jóvenes permanecieron varias semanas en la cárcel, hasta que finalmente se consiguió un acuerdo con la Fiscalía y fueron puestos en libertad bajo fianza, aunque sin autorización para que abandonaran el país.

"Hemos insistido en que fue un malentendido y aunque en principio no se creía, a base de insistir y aportar datos lo han acabado creyendo", explicó el embajador. En concreto, dijo, se demostró que uno de los jóvenes españoles tenía en su casa una colección de banderas y banderines de sus viajes.

Además, uno de los factores que más jugaba en su contra, y que era que al verse sorprendidos arrojaron algunos de los banderines al río desde el puente en el que se encontraban, se ha entendido como consecuencia del temor a ser reprendidos por la Policía y no como un hecho de desprecio hacia el símbolo letón.

OPINIÓN PÚBLICA "MUY SENSIBLE"

El embajador explicó que la opinión pública letona es "muy sensible a las gamberradas de turistas", sobretodo de los seguidores radicales británicos de fútbol. En este sentido, recordó que el pasado mes de abril "un hooligan orinó al pie del Monumento a la Libertad, considerado el corazón de la Letonia independiente".

Además, dijo, la semana pasada se produjo una pelea entre turistas británicos y ciudadanos letones que acabó con detenidos. Además, uno de los británicos "atacó a un policía con un espray en la cara y tuvo que ser hospitalizado". Por todo esto, señaló, en Letonia existe "un clima de opinión que pedía castigos ejemplares para turistas que no se comportan de manera adecuada", que "ha jugado en contra" de los dos españoles.

Asimismo, el embajador se referió a una "cierta paranoia a amenazas exteriores" en Letonia, ante su "gran vecino", en referencia a Rusia, que recientemente se vio reflejado en las manifestaciones prorrusas que tuvieron lugar en Estonia tras la retirada de un monumento al soldado soviético y que se saldaron con un muerto.

De esta manera, estimó Lorenzo Serra, "no cabe excluir que la Policía pensara en un principio que un grupo de siete personas podía tener intenciones, exagerando mucho, de desestabilizar el país", ya que "hay gente siempre en estos estamentos que ve cosas donde no las hay".

Así, "se creó un clima irracional" que, "a medida que las aguas se han ido serenando y con las gestiones realizadas, algunas a muy alto nivel", se ha podido relajar y finalmente se ha visto que era "un grupo de amigos que tenían unas copas de más e hicieron algo que no tenían que hacer".

UNA MULTA

El embajador se manfiestó "convencido" de que el asunto se resolverá "con una multa" y los jóvenes no volverán a pisar la prisión de Riga, ya que la acusación de ultraje "va a acabar cayendo".

Esta acusación, explicó, requiere dos aspectos. Uno, objetivo, es la presencia de una bandera en el ultraje y el segundo, subjetivo, requiere "la clara intención de ofender", algo que se ha descartado en el caso de los dos españoles, a pesar de que las autoridades letonas, "con la influencia del clima existente", querían "alegar a toda costa".

En este sentido, valoró positivamente que el juicio se celebre dentro de unos meses, ya que "a veces para que la Justicia pueda trabajar se necesita que las aguas se serenen".