MADRID, 7 May. (EUROPA PRESS) -
El director de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID), Juan Pablo de Laiglesia, dijo hoy que el Gobierno está preparado para tomar medidas adicionales a la aportación de medio millón de euros al fondo que el Programa Mundial de Alimentos (PAM) ha puesto en marcha para asistir a las víctimas del paso del ciclón Nargis por Birmania, anunciada ayer.
En una entrevista en RNE recogida por Europa Press, De Laiglesia explicó que la AECID considerará tomar nuevas medidas una vez que haya una evaluación de las necesidades, "que el Gobierno birmano todavía no ha producido".
A las 14.00 hora de Bangkok (9.00 hora peninsular española), habrá una reunión del equipo de evaluación de Naciones Unidas que se ha destacado allí, informó el responsable de la AECID. Después de dicha reunión, "tendremos ya una precisión sobre necesidades y estaremos en condiciones de tomar medidas adicionales, para las que estamos preparados", afirmó.
En cuanto a las dificultades para que la ayuda llegue a los damnificados debido a las restricciones impuestas por la Junta Militar Birmana, el director de la AECID manifestó que tanto España como el resto de la comunidad internacional y de los donantes, confían en que "estas medidas se vayan suavizando".
De Laiglesia dijo que desde Bangkok, donde está el centro de acopio de la ONU, están saliendo algunos convoyes, y que "hay facilidades para que pasen los bienes (a Birmania), pero dificultades para que pasen los que los acompañan". "Confiamos que esto vaya normalizándose porque el objetivo es llegar a los damnificados", agregó.
Mencionó que en cuanto la AECID tuvo constancia de la magnitud del ciclón y de sus estragos se puso en contacto inmediatamente con el sistema de la ONU --con su oficina de coordinación de acción humanitaria-- y con sus colegas europeos, para coordinar las acciones de apoyo.
La reunión mantenida ayer entre ministerios, Comunidades Autónomas y ONG supuso la activación del mecanismo de coordinación interna, señaló. En la reunión se estudiaron "las posibilidades y dificultades que entraña esta acción, que recuerda más al Tsunami que a otros impactos de ciclones en años pasados por su magnitud", afirmó.
