KINSHASA, 28 Ene. (del enviado especial de EUROPA PRESS, Eduardo González) -
El ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, Miguel Angel Moratinos, pidió hoy al Gobierno de la República Democrática del Congo una investigación "lo más seria y rigurosa posible" para llevar ante los tribunales a los autores del disparo de un obús en marzo de 2007 que alcanzó la Embajada de España en Kinshasa.
En un acto con el personal de la legación, Moratinos, que hoy se encuentra en Kinshasa dentro de la gira africana que inició el sábado pasado y que le ha llevado ya a Mali y Guinea Bissau, recordó que ese impacto "pudo costar la vida a todos los empleados de esta Embajada" el pasado 22 de marzo.
El jefe de la diplomacia española trasladó a los empleados de la Embajada su solidaridad y orgullo tanto en español como en francés, para dirigirse al personal local, y les condecoró por el "valor" que demostraron en ese accidente.
"Viendo sobre el terreno el impacto y las consecuencias que se hubieran podido derivar de ese impacto se le pone a uno la carne de gallina", reconoció el ministro, quien pudo comprobar in situ las marcas del proyectil que aún permanecen en los muros de la legación como el estado en que quedó la Embajada tras el impacto gracias a una exposición fotográfica situada en los pasillos de la representación.
En rueda de prensa previa al acto en la Embajada, el ministro congoleño de Exteriores, Antipas Mbusa, aseguró que el impacto del obús "no fue una acción contra España", sino un accidente que el Ejecutivo congoleño "lamenta". Asimismo, afirmó que el Gobierno al que pertenece asume la "responsabilidad de castigar a los culpables".
Un empleado español de la Embajada comentó a los periodistas, bajo la condición de mantener el anonimato que, a su juicio, el proyectil lo dispararon las fuerzas armadas del presidente Joseph Kabila, porque eran las únicas que poseían armamento de ese tipo.
Aquel 22 de marzo el personal de la Embajada española fue desalojado por el contingente militar uruguayo que participaba en la Misión de la ONU en ese país, Monuc, después de que el obús impactara contra la legación y provocara un agujero en la sala de espera, además de romper prácticamente todos los cristales del edificio.
Desde un primer momento, el Gobierno español consideró que el impacto del proyectil fue fruto del fuego cruzado que mantenían las fuerzas congoleñas leales al candidato presidencial Jean-Pierre Bemba y las del actual presidente, Joseph Kabila, en las inmediaciones de la residencia del primero.
Tras entrevistarse con su colega congoleño, Moratinos tiene previsto verse también con el primer ministro del país, Antoine Gizenga y con Kabila.
