Un ex alto cargo acusa al Gobierno de ocultar los problemas mentales que sufren los inmigrantes retenidos

Europa Press Internacional
Actualizado: martes, 7 julio 2015 17:01

SIDNEY 31 Jul. (EUROPA PRESS) -

El exdirector del Servicio Internacional de Salud Mental (IHMS) de Australia Peter Young ha denunciado que el Gobierno ha tratado de ocultar las cifras sobre el aumento de las enfermedades mentales entre los jóvenes inmigrantes confinados en centros de detención.

Young, que todavía trabaja como consultor para el IHMS, ha reconocido ante la Comisión de Derechos Humanos de Australia, que ha abierto una investigación sobre el caso, que las autoridades sanitarias reaccionaron "con alarma" ante los resultados y pidieron "retirar las cifras" del informe, según ha publicado el diario australiano 'The Australian'.

"La rección del departamento ha sido, es justo decirlo, negativa hacia el informe", ha dicho Young. "Está claro que hay un número de niños con importante sufrimiento y desorden mental en esta población", ha añadido. Según los datos recopilados por el doctor australiano, las tasas de estrés emocional y los malos comportamientos han aumentado entre los internos menores de 18 años a causa del confinamiento.

Por su parte, el secretario del Departamento de Inmigración, Martin Bowles, se ha limitado a precisar que si el personal del Departamento "hizo algo inapropiado" lo abordarán porque su "práctica normal es evaluar estas cosas". Sin embargo, Bowles ha dicho ante la comisión investigadora que el número de niños concentrados en centros de detención en Australia se ha reducido en más de 1.330 desde el máximo de 1992 alcanzado en julio de 2013.

Pero a pesar de las aclaraciones de Bowles, el Gobierno conservador del primer ministro, Tony Abbott, ha alardeado de su éxito en disuadir a los solicitantes de asilo y ha defendido que sus políticas tienen la obligación de salvar las vidas en el mar y de proteger la soberanía de Australia. Los solicitantes de asilo que llegan a Australia en barco son enviados a campamentos en Papúa Nueva Guinea y a Nauru, donde pasan largos periodos de detención mientras son procesados.

Los abogados de los refugiados corroboran que las detenciones de larga duración, a las que se añade la falta de información sobre cuándo y dónde serán reasentados los solicitantes de asilo, contribuyen al desarrollo de problemas de salud mental en las instalaciones, según informa la agencia Reuters. Este año, varios detenidos en un centro de la Isla de Navidad se cosieron los labios como parte de una huelga de hambre en protesta por el trato recibido.

Las medidas del Gobierno de Abott han recibido críticas de los grupos defensores de Derechos Humanos y de Naciones Unidas. Estos grupos también han alertado de una posible violación de las obligaciones de Australia ante estas situaciones, como país firmante de la Convención de Refugiados de la ONU. Esta semana, un grupo de líderes cristianos ha acusado al ministro de Inmigración, Scott Morrison, de cometer un "abuso de las sanciones estatales a los niños" con las duras medidas de protección de fronteras del Gobierno.

Últimas noticias sobre estos temas

Contenido patrocinado