MADRID, 29 Dic. (EUROPA PRESS) -
La Oficina Federal de Investigación estadounidense (FBI) habría sacado al líder de los talibán en Afganistán y líder del Emirato Islámico de Afganistán entre 1996 y 2001, Mohamad Omar --más conocido como mulá Omar--, de su lista de los terroristas más buscados, aunque la agencia ha afirmado que nunca llegó a estar incluido en la misma.
Según varios medios internacionales, fundamentalmente paquistaníes e indios, el FBI habría retirado al mulá Omar de la lista, en la que supuestamente figuraba bajo una recompensa de diez millones de dólares (7,7 millones de euros), para facilitar las negociaciones entre Estados Unidos y los talibán afganos, que comenzaron la semana pasada.
Sin embargo, el portavoz del FBI, Paul Bresson, ha manifestado que el mulá Omar nunca estuvo en la lista del FBI, aunque sí que figura en la lista de terroristas más buscados del Departamento de Estado bajo una recompensa de diez millones de dólares por cualquier información que pueda llevar a su detención.
Pese a que el Gobierno estadounidense no se ha pronunciado sobre este asunto, la prestigiosa publicación 'The Atlantic' ha respaldado la información facilitada por Bresson y ha señalado que el mulá Omar nunca llegó a formar parte de dicha lista.
La semana pasada, funcionarios estadounidenses confirmaron que se habían iniciado las conversaciones con personalidades de los talibán en Qatar y Alemania y que respaldaron incluso la apertura de una oficina política de los talibán en Qatar.
El mulá Omar, líder del Estado islámico establecido por los talibán tras tomar la ciudad de Kabul en 1996 y obligar a huir a las autoridades anteriores, y que llegó a controlar el 90 por ciento del territorio del país, se encuentra en paradero desconocido desde el comienzo de la operación militar encabezada en 2001 por Estados Unidos, que puso fin a su Gobierno.
Además, fue acusado por Washington de planificar los ataques terroristas contra el World Trade Center el 11 de septiembre de 2001. Sin embargo, desde el mes pasado las autoridades estadounidenses han comenzado a diferenciar a los talibán de la organización terrorista Al Qaeda de cara a suavizar el proceso de negociaciones.