MANILA, 1 Feb. (Reuters/EP) -
El ministro del Interior filipino, Eduardo Ano, ha informado de que los responsables del atentado suicida que mató a 22 personas e hirió a más de un centenar en una catedral de la ciudad de Jolo, en el sur del país, son una pareja de indonesios vinculados al grupo terrorista Abú Sayyaf, relacionado a su vez con Estado islámico.
"Son indonesios, estoy seguro", ha declarado Ano a la filial filipina de la cadena CNN, para ratificar este atentado suicida, un fenómeno prácticamente desconocido en Filipinas, donde son más habituales las incursiones armadas.
Estas declaraciones intentan zanjar una investigación profundamente contradictoria que comenzó con la contaminación de la escena del crimen, cometido el 27 de enero en la catedral de Nuestra Señora del Monte Carmelo. Primero, las fuerzas de seguridad aseguraron que los terroristas detonaron las bombas por control remoto hasta que el presidente de Filipinas, Rodrigo Duterte, aseguró el martes pasado que se trataba de un atentado suicida.
De acuerdo con las investigaciones, la primera bomba hizo explosión en el interior de la catedral y la segunda detonó a la entrada del edificio, cuando la gente comenzaba a huir despavorida.
Ahora, "todos los datos apuntan a que se ha tratado de un doble atentado suicida", según el secretario de Defensa de Filipinas, Delfín Lorenzana, después de que nadie haya reclamado los restos que faltan: los pies, brazos, torsos y cabezas de dos personas, un hombre y una mujer, según el portavoz militar, coronel Noel Detoyato.
"Las partes fueron encontradas en el exterior de la iglesia, esparcidas hasta unos 50 metros de la entrada", según el coronel, lo que coincide con la idea de que la mujer metió uno de los artefactos explosivos en el interior del edificio y luego salió para reunirse con su compañero, que ya tenía su propia bomba activada, para morir los dos en esta segunda detonación.
"Si llevas una mochila, los militares y policías te detendrán, pero si llevas los explosivos en tu cuerpo, solo parecerás gordo", dijo. Duterte señaló específicamente a Abú Sayyaf. "Nadie puede llevar a cabo un atentado así en esta zona del país", esgrimió.
