MANILA, 30 Abr. (EP/AP) -
El alcalde de una ciudad del norte de Filipinas ha muerto este lunes a causa de las heridas de bala recibidas, mientras que otro sobrevivió al ataque mientras participaba en actos de campaña de cara a los comicios parlamentarios y municipales del próximo mes, según dijeron las autoridades.
Casi 30 candidatos, muchos de ellos miembros de clanes políticos arraigados, han sido asesinados hasta ahora en el territorio nacional, que vivirá las elecciones el 14 de mayo.
El uso de armas, la existencia de ejércitos privados, la débil aplicación de la ley y las denuncias de compra de votos componen el escenario de las elecciones en Filipinas.
En el último derramamiento de sangre falleció este lunes el alcalde de San Carlos, a 160 kilómetros al norte de Manila, Julian Resuello, que perdió la vida al ser tiroteado en un gimnasio durante.
Uno de sus colaboradores, que intentó proteger a Resuello, también perdió la vida, mientras que otras cinco personas han resultado heridas, según informaciones difundidas por la Policía.
En un ataque separado, el alcalde de la ciudad de Morong, en la provincia de Bataan, Norberto Linao, sobrevivió después de que unos desconocidos abriesen fuego contra su vivienda. El edil estaba durmiendo con su familia.
