MADRID, 6 Mar. (EUROPA PRESS) -
La fiscalía especial de Corea del Sur ha afirmado este lunes que la apartada presidenta, Park Geun Hye, es sospechosa de aceptar sobornos, abuso de poder y tráfico de influencias, en los casos que implican a su confidente, Choi Soon Sil y varios de sus ayudantes.
En un comunicado publicado este lunes, la fiscalía ha indicado que Park supuestamente aceptó sobornos junto a Choi por parte del jefe 'de facto' y heredero del grupo Samsung, Lee Jae Yong.
Asimismo, ha indicado que Park estaría detrás de la creación de una 'lista negra' de cerca de 9.500 figuras de la cultura que eran críticas con su Administración, según ha informado la agencia surcoreana de noticias Yonhap.
La fiscalía especial ha detallado que Park y Choi usaron teléfonos contratados bajo otros nombres para comunicarse un totla de 573 veces entre abril y octubre de 2016.
La fiscalía especial entregará el caso a un consejero independiente, que seguirá adelante con la investigación, sin que por el momento se sepa si Park será interrogada por la Fiscalía.
El pasado mes de diciembre, el Parlamento surcoreano aprobó un 'impeachment' contra la presidenta por su presunta implicación en un caso de corrupción que salió a la luz tras la detención en octubre de Choi.
Park está acusada de abuso de poder para beneficiar a Choi, a través de presiones a líderes empresariales para que hicieran donaciones a las organizaciones no gubernamentales que gestionaba su amiga.
El Parlamento ha presentado un total de trece cargos contra Park: cinco violaciones a la Constitución y ocho delitos legales. Ahora el Tribunal Constitucional debe tomar una decisión, tras pasar los 180 días que tenía previstos para decidir si ratifica la destitución de la presidenta.
En caso de ratificarla, el Gobierno tendrá que convocar elecciones presidenciales anticipadas en un plazo de 60 días. En 2004, el tribunal rechazó el 'impeachment' del entonces presidente, Roh Moo Hyun, tres días después de que se anunciara la fecha de la decisión.
