KIEV, 21 Ago. (EP/AP) -
Un tribunal ucraniano ratificó hoy una sentencia previa que asegura que no hay suficientes pruebas concluyentes de investigadores rusos para determinar que un misil ucraniano abatió a un avión de pasajeros ruso en octubre de 2001.
La querella judicial fue presentada por cuatro familias israelíes que exigieron compensaciones al estrellarse el avión modelo Tu-154, perteneciente a la aerolínea Sibir y ahora rebautizada con el nombre S7.
El avión se dirigía procedente de Tel Aviv a la ciudad siberiana de Novosibirsk, donde cayó en picado en el Mar Negro, matando a 66 pasajeros y a sus 12 tripulantes que iban a bordo de la aeronave.