BIRMINGHAM (Estados Unidos), 10 (Reuters/EP)
El gobernador de Alabama, el republicano Robert Bentley, ha prometido este viernes revisar la nueva ley estatal de inmigración después de varios incidentes en los que trabajadores extranjeros han sido detenidos por la Policía por no llevar suficiente identificación.
Sin embargo, Bentley ha señalado que el portavoz de la Cámara de Representantes de Alabama, Mike Hubbard, y el presidente del Senado del estado, Prom Tem Del Marsh, no planean revocar o debilitar la ley, considerada la más dura de su tipo en el país.
"Reconocemos que se necesitan cambios para asegurar que Alabama no sólo tiene la ley más efectiva del país, sino también una justa, que promueve el crecimiento económico, preserva los puestos de trabajo para los que están en el estado de forma legal y que puede ser aplicada de manera efectiva y sin prejuicios", ha dicho Bentley a través de un comunicado. Los críticos a la ley han dicho que una revisión menor de la ley no será suficiente para salvar la ley.
En su comunicado, Bentley ha dado pocos datos acerca de los cambios propuestos, y únicamente ha dicho que asegurarán "que los oficiales de la ley tienen la claridad, la flexibilidad y las herramientas que necesitan para aplicar la ley de inmigración".
La decisión de Bentley llega después de que dos empleados extranjeros de una importante empresa automovilística de Alabama fueran detenidos por no poder presentar pruebas de residencia, generando publicidad negativa al estado y provocando una ola de peticiones para que se reexamine la ley. Los empleados --un ejecutivo alemán de Mercedes-Benz y un empleado japonés de Honda-- fueron liberados sin cargos después de la intervención del gobernador.
La ley de inmigración de Alabama, aprobada ampliamente por ambas cámaras durante esta legislatura, exige a la Policía que detenga a toda persona sospechosa de estar en el país de manera ilegal si no puede presentar la documentación adecuada en caso de ser parada por la calle por los agentes, que no han de dar motivos para la inspección.
Un tribunal de apelaciones bloqueó el mes pasado parte de la ley para evitar su aplicación, incluyendo una provisión que permite al estado solicitar a las escuelas públicas que determinen el estatus de residencia de los niños antes de aceptar su matrícula.
El Departamento de Justicia de Estados Unidos ha demandado a Alabama al considerar que la ley representa un esfuerzo inadmisible de establecer políticas de inmigración. El departamento de Derechos Civiles ha afirmado asimismo que la ley podría además violar la legislación de derechos civiles del país.