La ONU denuncia que el centro fue alcanzado por dos misiles y que los guardias dispararon contra quienes intentaron huir
MADRID, 4 Jul. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno de unidad libio, que cuenta con el reconocimiento de la comunidad internacional, ha indicado este jueves que está estudiando la posibilidad de cerrar todos los centros de detención de migrantes y refugiados en el país y liberar a todas las personas que se encuentran en ellos.
"El Gobierno está considerando el cierre de los centros y liberar a los inmigrantes ilegales para preservar sus vidas y seguridad", ha indicado el ministro del Interior, Fathi Bashagha, en un comunicado.
El ministro ha defendido que la protección de los centros de detención frente a bombardeos aéreos está más allá de las capacidades del Gobierno de unidad durante el encuentro que ha mantenido con la coordinadora humanitaria de la ONU en Libia, Maria Ribeiro.
La noticia del posible cierre se produce después de que un bombardeo aéreo contra el centro de detención de Tajura, en los alrededores de Trípoli, se saldara con la muerte de 53 migrantes, entre ellos seis niños, y otros 130 heridos, según el último balance ofrecido por la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de la ONU (OCHA).
Entre los fallecidos, según la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), había algunos que se habían registrado en su programa de repatriación voluntaria y "tenían previsto volver pronto a casa". Según la agencia de la ONU, de los 600 detenidos en Tajura, 130 se han inscrito en su programa de repatriaciones.
Las agencias de la ONU y las ONG vienen reclamando desde hace tiempo el cierre de estos centros, debido a las pésimas condiciones en las que viven quien se encuentran recluidos. Los llamamientos se intensificaron a raíz del inicio a principios de abril de la ofensiva sobre la capital por parte del mariscal de campo Jalifa Haftar, que apoya al Gobierno establecido en el este del país.
Tras producirse el bombardeo, tanto ACNUR como la OIM reclamaron "el fin inmediato de la detención de migrantes y refugiados" y que se garantice su protección en Libia. Asimismo, pidieron "urgentemente a la comunidad internacional que proporcione corredores humanitarios para que migrantes y refugiados sean evacuados de Libia".
DOBLE ATAQUE Y DISPAROS DE GUARDIAS
Según el informe publicado por la OCHA, el centro de detención de migrantes "aparentemente resultó alcanzado dos veces". "Un misil alcanzó un garaje desocupado y otro golpeó un hangar en el que había unos 120 refugiados y migrantes", ha precisado, denunciando que las partes en el conflicto tienen conocimiento de las coordenadas de los centros de detención.
Además, la OCHA ha precisado que "hay informaciones de que tras el primer impacto, algunos refugiados y migrantes fueron disparados por los guardias cuando intentaban escapar". El organismo de la ONU no ha precisado si estos disparos provocaron víctimas.
"Más de 600 refugiados y migrantes, incluidos mujeres y niños, estaban detenidos contra su voluntad en el centro de detención de Tajura en le momento del ataque", ha destacado la OCHA, recordando que dichas instalaciones ya resultaron alcanzadas por otro ataque en la zona el 7 de mayo que dejó dos heridos.
Una misión de las agencias de la ONU visitó el miércoles el centro de detención para recabar información y evaluar las necesidades humanitarias de las 500 personas que permanecen en él. Según el organismo de Naciones Unidas, "no parece haber a mano" ninguna instalación a la que poder trasladarles por el momento.
En total, unos 3.800 migrantes y refugiados se encuentran recluidos en centros de detención en Trípoli y sus alrededores "expuestos o cerca de los combates". "Como demuestra este incidente horrible, todas las personas dentro de estos centros están en riesgo inminente, ya que están recluidas en contra de su voluntad y no tienen medios para buscar su seguridad por su cuenta", ha denunciado OCHA.
El organismo ha resaltado que el suceso coincide con que hace tres meses de que Haftar lanzó su ofensiva. "El número de víctimas civiles causadas por el conflicto se ha prácticamente duplicado como resultado de este ataque", ha subrayado. Hasta el 27 de junio, la OCHA tenía contabilizadas 178 víctimas civiles, entre ellas 41 muertos.
