Grecia construirá una valla de 12,5 kilómetros para evitar la inmigración ilegal

ATENAS, 3 Ene. (Reuters/EP) -

Grecia planea construir una valla de 12,5 kilómetros en la frontera con Turquía para evitar la ola de inmigrantes que llegan al país heleno ilegalmente, según informó el ministro de Protección Ciudadana, Christos Papoutsis.

Los emigrantes de Asia y África utilizan cada vez más Evros, frontera de Grecia con Turquía para llegar a la Unión Europea, después de que el organismo intensificara la vigilancia en las fronteras marítimas en España e Italia y firmara acuerdos de repatriación con países africanos.

El año pasado, 128.000 inmigrantes ilegales entraron en Grecia, 40.000 de ellos por el puesto fronterizo Evros, según informó Papoutsis.

"Esta es la dura realidad y los ciudadanos griegos tenemos la obligación de hacer frente a esto", advirtió Papoutsis. "En un esfuerzo para gestionar la afluencia de inmigrantes ilegales, estamos procediendo con la instalación de medios para impedir la entrada ilegales a lo largo de los 12,5 kilómetros de frontera de la tierra en Evros", agregó.

La frontera de Grecia con Turquía se extiende en más de 200 kilómetros pero la valla se construirá en la zona por donde la mayoría de inmigrantes pasan ilegalmente, sostuvieron las autoridades.

Atenas se ha quejado de que Turquía no está haciendo lo suficiente para detener a los inmigrantes ilegales y que la negativa de Ankara a recuperar a los que han cruzado desde su territorio anima a utilizar esa ruta.

Sin embargo, ambos países se han comprometido en los últimos meses a mejorar su cooperación en este frente y Papoutsis indicó que las medidas no se establecían "de ninguna manera en contra de Turquía, por el contrario, facilitan e impulsan nuestra cooperación".

Nueve de cada diez inmigrantes ilegales utiliza Grecia como su trampolín hacia la Unión Europea y la deuda que tiene el país hace más difícil que se pueda luchar contra estos números.

"Se demostró en el pasado que las cercas y los muros son medidas a muy corto plazo que en realidad no ayudan a abordar y gestionar los problemas migratorios de una manera más consolidada y estructurada", advirtió un portavoz de la Comisión Europea.