Guinea Ec.- El Gobierno en el Exilio espera "las disculpas" de Moratinos por su intento de retirar el asilo a Moto

Actualizado: martes, 8 abril 2008 17:08

MADRID, 8 Abr. (EUROPA PRESS) -

El autoconstituido Gobierno de Guinea Ecuatorial en el Exilio está a la espera de las "disculpas" del ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Angel Moratinos, por su intento de retirar el asilo político a Severo Moto, después de que el Tribunal Supremo le devolviera a éste su estatus por considerar que el informe presentado por el Centro Nacional de Inteligencia (CNI) sobre sus actividades no probaba que constituyera "un peligro para la seguridad de España".

"Tras la sentencia del Tribunal Supremo que exculpa y absuelve a Severo Moto de los cargos de los que fue acusado por el Consejo de Ministros del Gobierno español y cuyas consecuencias fueron la retirada del estatuto de asilado político y el arrinconamiento y criminalización del proyecto opositor de Moto, el Gobierno de Guinea Ecuatorial en el Exilio y su presidente Severo Moto, esperan que, una vez conocida la sentencia, se produzcan las disculpas del Ejecutivo aún en funciones del Gobierno español, en especial del todavía ministro de Exteriores, Miguel Angel Moratinos", se lee en un comunicado.

Estas disculpas "las esperan también el Partido del Progreso, sus militantes y los miles de ciudadanos que creen en el proyecto democratizador de Moto, así como los opositores a la dictadura de (Teodoro) Obiang que gracias a la actitud del Gobierno español fueron criminalizados y puestos bajo sospecha", prosigue.

"A Severo Moto, y por ende, a todo su proyecto político, se le acusó de ser un peligro para España", afirma el Gobierno en el Exilio. "Queda demostrado ahora que las 'pruebas' que el Gobierno español presentó para anular su condición de exiliado en el país, no son suficientes ni demuestran, ni se acercan a lo que el Consejo de Ministros del 30 de diciembre de 2005 sentenció contra Severo Moto", añade.

Según el "ejecutivo" de Moto, "el Gobierno español debe disculparse y reconocer que acusó sin pruebas", así como "debe explicar cuáles fueron los motivos para arrinconar y perseguir a un ciudadano refugiado político y amenazado de muerte". "Basta de especulaciones y falsedades. De la misma forma que tiraron la piedra, veremos si el Gobierno democrático de todos los españoles, esconde o no la mano", concluye el texto.