Daños materiales tras un ataque con proyectiles contra la ciudad de Kiryat Shmona, en el norte de Israel (archivo) - Europa Press/Contacto/Ayal Margolin/JINI
El Ejército israelí dice haber interceptado "numerosos" proyectiles y bombardea supuestos objetivos de Hezbolá
MADRID, 28 Feb. (EUROPA PRESS) -
El Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) ha reclamado este miércoles la autoría de un ataque con proyectiles desde el sur de Líbano contra varios puntos en el norte de Israel, incidente que se ha saldado sin víctimas, si bien hay daños materiales en la localidad de Kiryat Shmona.
El brazo armado de Hamás, las Brigadas Ezzeldín al Qassam, han indicado que entre los objetivos hay posiciones militares y ha agregado que ha disparado "dos salvas de misiles con un total de 40 Grad".
Asimismo, ha recalcado que los ataques "son una respuesta a las masacres de civiles en la Franja de Gaza y el asesinato de líderes que han caído mártires y sus hermanos en el sur de Líbano", según ha informado el diario palestino 'Filastin', vinculado al grupo islamista palestino.
Por su parte, el Ejército de Israel ha afirmado haber interceptado "numerosos" proyectiles disparados desde el sur de Líbano y ha agregado que "las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) atacaron la fuente de los disparos en territorio libanés".
En este sentido, ha destacado que también ha bombardeado "un almacén de municiones" y "edificios militares" del partido-milicia chií Hezbolá en la región de Ramiya, en el sur de Líbano, sin que haya informaciones sobre víctimas.
"Durante la noche, las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) atacaron un lugar de producción de armas de la organización terrorista Hezbolá en Jarbat Salem", ha zanjado, tal y como recoge un breve comunicado publicado a través de su página web.
El Ejército de Israel y Hezbolá --un grupo respaldado por Irán y que cuenta con un importante peso político en Líbano-- han protagonizado enfrentamientos diarios en la frontera común desde el 8 de octubre, un día después de los ataques perpetrados por Hamás contra territorio israelí, lo que ha hecho temer con una expansión del conflicto en la región.
