Hatoyama advierte al gobernador de Okinawa de que no es posible recolocar toda la base militar de EEUU

Actualizado: martes, 4 mayo 2010 14:24


MADRID, 4 May. (EUROPA PRESS) -

El primer ministro japonés, Yukio Hatoyama, advirtió este martes al gobernador de la isla de Okinawa (sur), Hirokazu Nakaima, que no es posible recolocar todas las funciones de la base militar estadounidense de Futenma fuera de la prefectura de Okinawa, y apeló a la importancia de mantener la alianza de seguridad entre Estados Unidos y Japón y la disuasión estadounidense en la región asiática.

"En términos de disuasión, he determinado que transferir todas las funciones fuera de la prefectura o en otro lugar es difícil", aseguró Hatoyama después de reunirse con Nakaima. Hatoyama, en su primera visita a la isla desde que asumió su cargo el pasado mes de septiembre, afirmó que había comunicado al gobernador que pedía a Okinawa que siguiera asumiendo la carga de albergar la instalación.

A falta de menos de un mes para su fecha límite autoimpuesta para liquidar la cuestión de Futenma, es la primera vez que el dirigente japonés ha anunciado su intención de transferir parte de la instalación dentro de la misma prefectura.

Durante las conversaciones, que estuvieron parcialmente abiertas a los medios, Hatoyama también ofreció una disculpa al pueblo de Okinawa por haber causado confusión y preocupación por su forma de tratar el tema, e indicó que aún tiene que terminar el plan sobre dónde recolocar el aeródromo de Futenma, informa la agencia de noticias Kiodo.

Por su parte, Nakaima pidió a Hatoyama que avance en su intento por reducir la carga de Okinawa de "una manera visible" y pidió específicamente la consolidación de las bases militares estadounidenses, incluida la base aérea de Kadena y otras instalaciones localizadas en el sur.

"Crecen las peticiones en Okinawa para que Futenma se traslade fuera de la prefectura", aseguró el gobernador a Hatoyama. "Me gustaría que el Gobierno lo estudiara con seriedad e hiciera esfuerzos para eliminar los riesgos" que supone la base, añadió.

Nakaima declaró más tarde a los periodistas que hay cierta "distancia" entre el Gobierno central y los habitantes de la isla, pero expresó su esperanza de que el primer ministro considere esta cuestión por las promesas que hizo durante su campaña electoral del año pasado.