MADRID, 10 Abr. (EUROPA PRESS) -
Los huthis han tildado de "maniobra política y mediática" la declaración un alto el fuego de dos semanas por parte de la coalición que encabeza Arabia Saudí y han subrayado que mantendrán sus ataques hasta que Riad no ponga fin al bloqueo a Yemen.
La coalición internacional anunció el miércoles un alto el fuego de dos semanas, que entró en vigor el jueves, a raíz del llamamiento de Naciones Unidas a un fin de los combates a causa del coronavirus.
El portavoz de Ansar Alá, Muhamad al Bujaiti, ha señalado en declaraciones a la cadena de televisión qatarí Al Yazira que "mientras el cerco no sea levantado, hay derecho a usar los sistemas de misiles, así como los de defensa aérea y marítima, incluidos los drones".
"Seguiremos atacando sus instalaciones militares e industriales. Es la continuación de la guerra", ha señalado, antes de acusar a la coalición de "manipular las palabras" con su anuncio.
Por ello, Al Bujaiti ha manifestado que "si no hay un cese total de las hostilidades y un fin del bloqueo (a Yemen), la guerra continuará".
En esta misma línea se ha expresado el jefe de la delegación negociadora de los huthis, Mohamed Abdelsalam, quien ha dicho que el alto el fuego "es infundado", antes de denunciar que las operaciones de la coalición "siguen en varios frentes".
"El alto el fuego saudí es sólo una maniobra política y mediática que tiene como objetivo confundir los diálogos serios que tienen lugar con Naciones Unidas y limpiar las manchas de sangre de Arabia Saudí", ha argüido.
En este sentido, ha reiterado que "la posición correcta es que el fin de la guerra y la retirada del bloqueo sean declarados a partir de la visión yemení", según ha informado Ansar Alá en su página web.
"INCREMENTO DE OPERACIONES"
Abdelsalam ha argumentado además que un alto el fuego de dos semanas no es suficiente para hacer frente a la pandemia de coronavirus, ya que "no permitirá a los yemeníes tomar medida alguna contra la epidemia".
"Los yemeníes están muriendo bajo el bloqueo y las epidemias causadas por el bloqueo y no puede haber una tregua humanitaria, como dice Arabia Saudí, mientras continúe el bloqueo", ha denunciado.
Así, ha indicado igualmente que "la tregua no se ve reflejada sobre el terreno, dado el incremento de las operaciones por parte de la coalición", al tiempo que ha criticado que "Arabia Saudí quiera ser líder de la guerra y una parte involucrada en la paz".
Abdelsalam, que ha confirmado "extensos contactos" con Arabia Saudí, ha pedido a Riad "que se siente en la mesa de diálogo" y ha dicho que "un alto el fuego real y una retirada del bloqueo sería considerado un paso positivo".
"Si Arabia Saudí detiene la agresión y levanta el bloqueo, pararemos todas las operaciones militares, dentro del marco del derecho a respuesta. No estamos en la posición del atacante", ha zanjado.
EL ANUNCIO DE LA COALICIÓN
El portavoz de la coalición, Turki al Malki, destacó que se respaldaba así el anuncio del 25 de marzo del Gobierno reconocido internacionalmente, tras el llamamiento de Guterres a favor de un fin de los combates a nivel mundial por el coronavirus.
Al Malki dijo que la decisión, que "puede ser extendida", busca "crear las condiciones apropiadas para aplicar la invitación del enviado especial de la ONU para Yemen para reducir las tensiones y dar pasos prácticos para generar confianza entre las partes en los aspectos humanitario y económico".
En este sentido, argumentó además que este alto el fuego "apoyará en gran medida los pasos de Naciones Unidas para lograr una solución política exhaustiva y justa aceptada por los yemeníes".
El secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, aplaudió el anuncio de la coalición y pidió a los huthis que "cumplan su compromiso" y "cesen inmediatamente las hostilidades".
En su comunicado, Guterres sostuvo que el alto el fuego unilateral "puede ayudar a avanzar los esfuerzos hacia la paz, así como la respuesta del país ante la pandemia de coronavirus".
"Pido al Gobierno y a los huthis que mantengan contactos, de buena fe y sin condiciones previas, en unas negociaciones facilitadas por mi enviado especial (para Yemen), Martin Griffiths", manifestó.
Griffiths aplaudió igualmente el anuncio de la coalición y expresó su "agradecimiento" a Arabia Saudí y la fuerza internacional "por actuar en este momento crítico para Yemen".
"Las partes deben ahora utilizar esta oportunidad y cesar inmediatamente todas las hostilidades con la mayor urgencia y hacer progresos de cara a una paz exhaustiva y sostenible", remachó.
AUMENTO DE LOS COMBATES DESDE ENERO
Griffiths pidió en marzo una "desescalada militar inmediata e incondicional" para alejar al país del "precario camino" al que se dirige a causa del recrudecimiento de los enfrentamientos desde enero.
"Veo al país en un punto crítico. Las partes en conflicto pueden llevar Yemen hacia una desescalada y el reinicio del proceso político o, me temo, hacia una mayor violencia y sufrimiento que hará más arduo el camino hacia la mesa de negociación", alertó.
El conflicto en Yemen, que enfrenta al Gobierno de Abdo Rabbu Mansur Hadi, apoyado por una coalición militar liderada por Arabia Saudí, y los rebeldes huthis, respaldados por Irán, ha provocado la mayor crisis humanitaria mundial y dejado más de 100.000 muertos.
Además, el 80 por ciento de la población necesita ayuda humanitaria, mientras que diez millones de personas están al borde de la hambruna y otros siete millones sufren desnutrición, según datos de la ONU.
