BAGDAD, 30 Mar. (EP/AP) -
Los soldados estadounidenses e iraquíes detuvieron esta pasada madrugada a un supuesto miliciano acusado de la introducción en Irak de un sofisticado tipo de bombas procedente, según Washington, de Irán, según informó el Ejército norteamericano en un comunicado.
El sospechoso, detenido durante una operación en el barrio bagdadí de Ciudad Sadr --de mayoría chií--, está acusado de tener relaciones con las redes de tráfico que introducen los llamados Proyectiles Formados por Explosivos (Explosively Formed Projectiles, o EFP) en Irak, según el Ejército.
Asimismo, se cree que el detenido está relacionado con varios grupos extremistas responsables de ataques contra las fuerzas estadounidenses e iraquíes, prosiguió el comunicado. Las EFP han causado más de 170 muertos entre soldados estadounidenses e iraquíes desde mediados de 2004, según el comunicado.
El Ejército no informó del nombre del detenido ni de los grupos a los que estaría vinculado. En los últimos meses, los militares estadounidenses han acusado a la Guardia Revolucionaria de Irán de haber entregado armas y componentes de bombas a las milicias chiíes iraquíes.
Según varios vecinos de la zona, el detenido es un hombre de 58 años, padre de seis hijos y desempleado. Asimismo, indicaron que la operación comenzó hacia las dos de la madrugada (una hora menos en España peninsular) y que las tropas americanas e iraquíes confiscaron dinero, un ordenador y varios teléfonos móviles.
