Irak.- La Misión de la ONU reclama a EEUU que las empresas de seguridad rindan cuenta de la muerte de civiles iraquíes

Actualizado: jueves, 11 octubre 2007 14:01

El informe sobre DDHH expresa su preocupación por las numerosas muertes de civiles en operaciones armadas estadounidenses

BAGDAD, 11 Oct. (EP/AP) -

La Misión de Asistencia a Irak de la ONU (UNAMI) reclamó hoy a Estados Unidos que garantice que las empresas privadas de seguridad deberán rendir cuentas de la muerte injustificada de civiles iraquíes y serán perseguidas por los delitos que puedan cometer en Irak, al tiempo que advirtió de que el uso de estos contratistas fuertemente armados podría difuminar, a ojos de los iraquíes, la "fundamental diferencia entre civiles y militares".

La Misión también expresó su preocupación por las numerosas muertes de civiles iraquíes en operaciones militares norteamericanas en el marco de las medidas de seguridad puestas en marcha en Bagdad y alrededores. Al menos 88 civiles iraquíes han muerto en ataques aéreos estadounidenses y muchos otros a manos de las fuerzas de tierra en el contexto de estas medidas de seguridad en la zona de Bagdad, según informó hoy UNAMI en su informe bianual sobre Derechos Humanos.

El informe da cuenta de numerosos casos de "homicidios perpetrados por contratistas privados encargados de funciones relacionadas con la seguridad en apoyo de las autoridades gubernamentales estadounidenses".

El pasado martes, un grupo guardias privados al servicio de las empresa australiana Unity Resources Group disparó contra un automóvil que se acercaba a un convoy y causó la muerte de dos mujeres. La empresa aseguró que sus contratistas temían que se tratase de un atentado suicida y que dispararon únicamente después de que el conductor desobedeciera sus órdenes para que detuviera.

La empresa Blackwater USA, la más importante firma estadounidense encargada de proteger al personal diplomático en Bagdad, también está siendo investigada por el homicidio de 17 iraquíes contra los que sus contratistas abrieron fuego en una encrucijada del centro de Bagdad el pasado 16 de septiembre. La empresa aseguró que sus guardias habían respondido a un ataque armado.

Estos casos han disparado aún más el odio entre los iraquíes hacia las empresas privadas de seguridad. El Gobierno iraquí ha abierto investigaciones y se ha creado un equipo conjunto iraquí y estadounidense con la misión de supervisar las acciones de estas empresas, que suelen gozar de una total impunidad y de muy poca vigilancia en Irak.

Por ello, UNAMI ha pedido al Gobierno de Estados Unidos que establezca mecanismos para garantizar que los contratistas de seguridad rendirán cuentas por los homicidios no justificados de civiles y que todos los delitos cometidos en Irak "por cualquier tipo de contratista estadounidense" serán perseguidos por la Justicia.

Asimismo, la Misión ha pedido a las empresas que respeten el Derecho Internacional Humanitario y ha advertido de que sus actividades "ponen en peligro la fundamental distinción entre civiles y combatientes, dado que no se aprecia claramente la pertenencia de estas personas a unos u otros".

MUERTE DE CIVILES

El informe de UNAMI alerta de que los civiles siguen pagando las consecuencias de la violencia entre suníes y chiíes y precisa que no es posible aportar cifras fiables de víctimas porque no se ha podido persuadir al Gobierno iraquí para que difunda los datos compilados por el Ministerio de Sanidad y por otras instituciones.

Las acciones militares estadounidenses para contener la violencia también han causado la muerte de numerosos civiles, por lo que la Misión ha pedido que todas las denuncias sobre ejecuciones extrajudiciales sean debidamente investigadas y que se "actúa adecuadamente contra el personal militar a quien se compruebe que ha hecho un uso excesivo o indiscriminado de la fuerza".

El informe, que cubre el periodo entre los pasados 1 de abril y 30 de junio, cita como ejemplo la muerte de al menos 88 civiles en bombardeos aéreos norteamericanos, entre ellos el caso de siete niños que fallecieron después de que unos helicópteros atacaran una escuela elemental cerca de la frontera con Irán, en la provincia de Diyala.

El Ejército estadounidense ha asegurado que está investigando estos hechos. "No obstante, los resultados de estas investigaciones no se publican por sistema", señala el informe de UNAMI. La Misión también da cuenta de la muerte de 15 civiles iraquíes, entre ellos un niños de 14 años, en el curso de ataques y operaciones de rastreo estadounidenses.