Irak.- El toque de queda en Basora enciende las alarmas ante las necesidades de agua

Actualizado: miércoles, 26 marzo 2008 16:59

MADRID, 26 Mar. (EUROPA PRESS) -

La imposición del toque de queda en la ciudad iraquí de Basora después de los enfrentamientos ayer entre el Ejército y la milicia del Ejército del Mahdi han encendido todas las alarmas entre la población debido a la imposibilidad de conseguir ciertos productos básicos, entre ellos el agua.

La vida en Basora, la segunda ciudad de Irak, se ha visto paralizada ante la gran operación desplegada por las fuerzas militares para combatir a esta milicia, según alertó Mahdi al Tamimi, director de la Oficina de Derechos Humanos de la localidad.

Tras el primer día de combates, el Gobierno iraquí impuso un toque de queda a primera hora de la mañana de ayer. Así, la población tiene prohibido moverse de un barrio a otro y se han colocado puestos de control para extremar la seguridad.

"La necesidad más apremiante es beber agua, ya que los residentes de Basora dependen del agua mineral porque no beben agua del grifo, primero por la contaminación y segundo por su alta salinidad", explicó Al Tamimi a la agencia de noticias de la ONU, IRIN.

Según advirtió, "esto es una catástrofe que puede derivar en un mayor problema ahora que llega el verano y, por supuesto, si continúa así, puede llevar a enfermedades relacionadas con el mal estado del agua, incluyendo la diarrea".

VIDA PARALIZADA

Asimismo, Al Tamimi explicó que "todos los aspectos de la vida se han paralizado con el cierre de escuelas, oficinas gubernamentales y mercados debido a los enfrentamientos, que han obligado a la gente a quedarse en casa sin suficiente comida".

Pero el toque de queda y los continuos combates hacen que los habitantes de Basora no puedan llegar a los hospitales para recibir tratamiento y las operaciones han sido suspendidas, lo cual afecta especialmente a los desplazados internos.

Basora acoge a 5.707 familias desplazadas, es decir, 34.172 personas, la mayoría de los cuales viven en campamentos improvisados, según datos de la Media Luna Roja de Irak.

"Hago un llamamiento al Gobierno para que permita que nuestros equipos al menos ayuden a distribuir agua potable y ayuden a proteger a todos los equipos humanitarios para que hagan su trabajo de ayuda a las familias desplazadas", indicó.