TEHRAN 11 Jul. (EP/AP) -
Una delegación de cinco miembros "destacados" de la la Agencia Internacional de la Energía Atómica (AIEA), incluido el vicedirector de la Agencia, Olli Heinonen, llegó hoy a Irán para comprobar si el Gobierno iraní está dispuesto a contestar a las preguntas sobre su programa nuclear durante los dos días que durará la visita, según informó la cadena estatal iraní.
Heinonen se reunirá con el principal negociador en materia nuclear, Ali Lariyani, durante el día de hoy, pero la delegación no inspeccionará las instalaciones nucleares iraníes. Las conclusiones de las conversaciones serán anunciadas mañana jueves, según la cadena de televisión.
La visita tiene lugar después de que Lariyani y el director de la AIEA, Mohammad ElBaradei se encontrasen el mes pasado en Viena y dos días después de que ElBaradei anunciase que Irán ha limitado su programa de enriquecimiento de uranio, y de que pidiese al Gobierno una mayor voluntad para resolver el punto muerto en el que se encuentran las negociaciones sobre el programa.
Miembros del Consejo de Seguridad de la ONU preparan un debate para discutir un tercer paquete de sanciones contra la República Islámica de Irán en respuesta a la negativa de este país a suspender el enriquecimiento de uranio, que puede ser usado tanto para conseguir energía nuclear para los civiles como para fines militares.
ElBaradei comentó el pasado lunes en Viena que si Teherán cumple su promesa de contestar a las preguntas sobre su programa nuclear y congela todas las actividades de enriquecimiento, "influirá en las acciones" de las seis naciones, los cinco miembros permanentes del Consejo y Alemania.
Irán insiste en que quiere desarrollar un programa de enriquecimiento con el único objetivo de generar energía, pero Estados Unidos y algunos de sus aliados temen que pueda usarse para fabricar misiles nucleares. La República islámica comentó que está preparada para eliminar las sospechas sobre sus actividades nucleares en las negociaciones pero se niega a una suspensión del enriquecimiento, una de las condiciones básicas para reanudar las negociaciones impuesta por el Consejo.