MADRID 4 Nov. (EUROPA PRESS) -
El Ministerio de Exteriores iraní ha convocado al embajador suizo en Teherán --que representa oficialmente los intereses estadounidenses en el país-- para protestar por las declaraciones vertidas por algunos miembros de la Cámara de Representantes estadounidense, en las que solicitaron el inicio de operaciones encubiertas contra el país islámico e incluso el asesinato de políticos del país.
Así, Teherán ha enviado una dura nota al embajador suizo para expresar la enérgica condena del Ejecutivo iraní a "la continuación de las políticas estadounidenses en apoyo al terrorismo de Estado", según ha informado el Ministerio a través de un comunicado.
El comunicado también cita al presidente del Comité para Norteamérica del Ministerio de Exteriores iraní, que ha dicho que el "cuestionable silencio" del Gobierno estadounidense sobre estas amenazas "contradice las obligaciones legales de Washington de cara a su lucha contra el terrorismo".
"En vista de las amenazas proferidas contra nuestros políticos en esa sesión, la responsabilidad de cualquier acto terrorista contra las autoridades iraníes será de la Administración estadounidense", ha agregado.
Durante una reunión del comité de Seguridad Nacional de la Cámara de Representantes estadounidense el pasado 26 de octubre, varios oficiales solicitaron a la Casa Blanca que lanzara operaciones encubiertas contra Irán o incluso que "asesinara" a autoridades iraníes. Estas declaraciones se produjeron al hilo del supuesto complot iraní para asesinar al embajador saudí en Estados Unidos, Adel al Jubeir.
"Tenemos que poner nuestras manos alrededor de su garganta ahora. ¿Por qué no les matamos? Matamos a las personas que matan a otros", dijo el ex general del Ejército Jack Keane. "Y no retiremos nuestras manos. Si la comunidad internacional no quiere unirse, vamos sin ellos", agregó.
Por su parte, el ex agente de la CIA Reuel Marc Gerecht, ahora parte del 'think tank' Fundación para la Defensa de las Democracias, dijo no creer "que se pueda intimidar realmente a esta gente (el Gobierno de Irán), conseguir su atención, sin disparar a alguien".
El 11 de octubre, el Departamento de Justicia estadounidense acusó a Irán de urdir un complot para asesinar a Al Jubeir. Irán ha desmentido estas acusaciones y ha recalcado que Washington ha generado una trama falsa para desviar la atención de las protestas contra el Gobierno y los mercados internacionales que recorren el país, así como para poner en contra a Teherán y Riad y desestabilizar la zona.