ROMA, 1 Jul. (de la corresponsal de EUROPA PRESS, Gloria Moreno) -
El balance del accidente de tren que tuvo lugar ayer en la ciudad de Viareggio, en norte de Italia, asciende ya a 16 muertos, 31 heridos, de los cuales 21 muy graves, y tres desaparecidos, según los últimos datos facilitados por las autoridades italianas.
Entre las víctimas mortales figuran varios niños, dos de los cuales fueron recuperados sin vida de debajo de las ruinas. La tercera niña era extranjera y murió en el hospital pediátrico Bambin Gesú de Roma, a donde había sido trasladada en estado muy crítico.
Anoche también falleció el pequeño Lorenzo, de dos años de edad, que había sido ingresado en estado gravísimo, con quemaduras en el 90 por ciento del cuerpo, en el hospital Meyer de Florencia, la capital de la Toscana, que es la región donde se encuentra Viareggio.
Además, tres personas se encuentran todavía desaparecidas. Sin embargo, a medida que pasan las horas decrece la posibilidad de que puedan encontrarse bajo los escombros, motivo por el que el Ayuntamiento de Viareggio ha pedido a los vecinos de las calles afectadas por la explosión que se pongan en contacto con las autoridades para confirmar que se encuentran sanos y salvos.
El accidente tuvo lugar en la madrugada del martes al explotar un tren de mercancías que contenía gas licuado de petróleo (GLP). Según una primera reconstrucción de los hechos, el tren sufrió un fallo estructural y descarriló, lo que provocó la fuga de gas que luego causó la explosión.
Ésta provocó el derrumbe de dos edificios, mientras que otros muchos sufrieron daños de diversa índole y también tuvieron que ser evacuados. Los Bomberos siguen buscando a tres desaparecidos entre los escombros.
Los dos maquinistas del tren se hallan sanos y salvos tras lograr escapar "de milagro" mientras se producía la explosión, según relataron ellos mismos. La zona de la estación sigue acordonada, mientras los servicios técnicos especializados trabajan en la difícil y peligrosa tarea de trasladar las cisternas de gas a un lugar seguro.
En total, tuvieron que ser evacuadas más de 1.100 personas, de las cuales 700 encontraron alojamiento en casas de parientes y amigos mientras que unas 300 tuvieron que ser acogidas por los servicios de asistencia italianos.
