BEIRUT 30 Mar. (EP/AP) -
El secretario general de la ONU, Ban Ki Moon, hizo hoy un llamamiento en Beirut a la total implementación de la resolución del Consejo de Seguridad de la ONU que puso fin a la guerra del pasado verano entre Israel y la milicia chií libanesa Hezbolá.
Asimismo, Ban también pidió a los líderes rivales del país que se comprometan en el diálogo, como la única manera de poner fin a la crisis política, y que permitan que un tribunal internacional juzgue a los sospechosos por el asesinato en 2005 del ex primer ministro Rafik Hariri.
"Creo --y todo el mundo cree-- que el diálogo es la única manera de que Líbano alcance la estabilidad y la unidad nacional a la que aspira", consideró, antes de subrayar su compromiso para la formación que juzgue el asesinato de Hariri "lo antes posible". "Insto a las partes a que encuentren una solución rápida a este asunto con el respeto a los procedimientos constitucionales de Líbano", agregó.
El secretario general se reunió, en encuentros separados, con el presidente del Parlamento, Nabih Berri, líder destacado de la oposición, y con el primer ministro, Fuad Siniora, que cuetna con el apoyo de la mayoría parlamentaria.
"Destaqué la importancia de la plena implementación de esta resolución", explicó Ban a los periodistas tras encontrarse con Berri, aliado próximo de Hezbolá.
El secretario general ha criticado tanto a Israel como a Líbano violar la resolución 1701, especialmente el aumento de vuelos militares israelíes en su frontera norte en febrero y a principios de marzo.
La resolución también pide el fin del envío de armas a Hezbolá y la "libertad incondicional" de dos soldados israelíes capturados por la milicia chií en el acto que dio comienzo a la guerra, de 34 días de duración.
Ban llegó ayer a Beirut procedente de Riad, en Arabia Saudí, donde asistió a la Cumbre de la Liga Arabe. Su gira por Oriente Próximo también incluye paradas por Irak, Jordania, Egipto, Israel y los territorios palestinos.