Denuncia la "práctica imposibilidad" de acceder a la población civil y las violaciones del derecho internacional humanitario
MADRID, 25 Jul. (EUROPA PRESS) -
La Red Internacional de Médicos del Mundo ha desplegado en Líbano varios equipos médicos para hacer frente a la emergencia humanitaria que atraviesa el país, según informó en un comunicado.
Dos semanas después del inicio de la ofensiva israelí, las cifras oficiales señalan que el conflicto ha producido la muerte de 300 personas, mil heridos y casi medio millón de desplazados, que en su mayoría han huido del sur del país buscar refugio en parques públicos, escuelas y centros de salud del norte o de la capital.
Médicos del Mundo Francia, presente en Líbano desde los años ochenta, puso en marcha el pasado 13 de julio un dispositivo de emergencia consistente en evaluar las necesidades médicas más urgentes e identificar a grupos de población vulnerable.
Esta evaluación está siendo desarrollada por el equipo de Médicos del Mundo Francia con misión permanente en el país: dos cooperantes expatriados y 10 empleados locales que desde septiembre de 2004 desarrollan en las prisiones libanesas un programa para facilitar el acceso a la salud de las personas migrantes, refugiadas o solicitantes de asilo.
Este equipo fue reforzado con el envío de un grupo de tres personas (una a Beirut, otras dos al sur del país) y la contratación de personal médico local. El día 21 de julio, se organizaron dos unidades móviles (que pasaron a ser 4 el día 23), para brindar consulta médica y repartir de forma urgente medicamentos entre la población desplazada, especialmente entre las personas aquejadas por una enfermedad infecciosa o por una patología crónica cuyo tratamiento se haya visto interrumpido.
Los medicamentos que distribuye el equipo francés provienen de un stock, que ha sido almacenado por la misión permanente en el país. Este stock se completa con el material médico y las medicinas (por valor de 48.000 euros) enviadas desde Francia.
El coordinador y el cirujano de la misión han evaluado las necesidades de los hospitales de Saïda y Tyr y, al entender que los equipos locales están debidamente equipados y trabajan de forma relativamente satisfactoria, tienen previsto desplazarse al sur del país.
"Si bien, será una tarea difícil y lenta: numerosos puentes y carreteras han sido destruidos por los bombardeos, de forma que algunas poblaciones del sudeste (Ain Ebel, Debel, Helta, Ramia, Al Mary, y Magidiyyeh) están completamente incomunicadas y desabastecidas de alimentos básicos y medicamentos", advirtió la organización.
Estas poblaciones aisladas, junto a las personas desplazadas por el conflicto y los refugiados palestinos (en el caso de que los campos se conviertan en blancos militares) serán, en principio los objetivos prioritarios de la intervención de la Red Internacional de Médicos del Mundo.
Las delegaciones de Médicos del Mundo Grecia y Chipre también han desplegado sendos equipos: un equipo griego formado por cuatro médicos se trasladó el pasado 21 de julio a Líbano transportando un primer cargamento de medicinas y material médico. La delegación chipriota ha desplazado a tres profesionales médicos y ha enviado medicamentos donados por su gobierno.
Tanto el personal como el material se ha destinado a los hospitales de la Media Luna Roja en Beirut, desde donde se están estableciendo los pertinentes contactos con las autoridades locales y otras ONG presentes en la zona para evaluar la situación y establecer la pertinencia del envío de más personal.
Médicos del Mundo denuncia la "práctica imposibilidad" de acceder a la población civil y las violaciones del derecho internacional humanitario. La asociación llama al cese inmediato de la violencia.
La Red Internacional de Médicos del Mundo aúna a delegaciones o representaciones de la asociación presentes en Argentina, Bélgica, Canadá, Chipre, España, Estados Unidos, Francia, Grecia, Italia, Portugal, Suecia y Suiza, que comparten una visión internacionalista, tanto en la concepción de la ayuda a los más desfavorecidos, como en el trabajo de implantar una idea de solidaridad global en todos los países.
