ESTORIL (PORTUGAL), 1 Dic. (EUROPA PRESS/Beatriz Fernández) -
Los líderes iberoamericanos se acercan a un consenso para abogar por la apertura de un proceso de reconciliación nacional en Honduras, aunque aún no está claro de qué forma lo plasmarán en la declaración que adoptarán hoy al término de la Cumbre de Estoril, han informado a Europa Press fuentes diplomáticas españolas.
La necesidad de que se inicie un proceso de reconciliación en el país constituye un "elemento claro de consenso" entre los líderes, aseguran las fuentes, que no pudieron precisar si la Cumbre Iberoamericana incluirá en su comunicado un llamamiento al lanzamiento de un diálogo nacional, ya que entre los mandatarios hay opiniones diversas sobre la importancia que se da a este elemento.
El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, abogó ayer por un "gran acuerdo nacional" en Honduras que ayude al país a "recuperar la estabilidad democrática". El jefe del Ejecutivo, según explicaron fuentes gubernamentales, concede a este elemento mucha más importancia que al debate sobre el reconocimiento del resultado de los comicios, que han dado la victoria al candidato del Partido Nacional, Porfirio Lobo.
España cree que en ese diálogo nacional "lo más determinante" para dar una salida a la situación actual es lo que Lobo impulse, "no en calidad" de qué lo impulse, ya que habrá quien le reconozca como presidente electo y otros sectores de la sociedad hondureña que no.
Sobre la restitución de Zelaya en sus funciones, el Gobierno español señala que es el Parlamento hondureño el que tiene que decidir sobre esta cuestión, tal y como preveía el acuerdo Tegucigalpa San José que firmaron Zelaya y el presidente de facto, Roberto Micheletti, en octubre pasado. Este debate y votación parlamentaria se ha fijado para mañana.
El comunicado que adoptará hoy la Cumbre Iberoamericana -las fuentes diplomáticas consultadas se mostraron convencidas de que habrá un texto-- reiterará la condena al golpe de Estado del pasado 28 de junio, ya que todos los líderes están de acuerdo en que sería "muy grave que sentara un precedente".
