BENGHAZI (LIBIA), 16 Abr. (Reuters/EP) -
Cerca de 1.200 evacuados procedentes de Misrata han llegadoa la ciudad de Benghazi, capital de los rebeldes, para huir de los combates que se desarrollan en su lugar de origen. Se trata de una pequeña parte de las miles de personas que desesperadamente intentan salir de Misrata.
Jeremy Haslam, de la Organización Internacional de las Migraciones (OIM) calcula que todavía debe evacuarse a entre 8.000 y 10.000 personas. Los bombardeos hacen imposible acceder a muchas zonas de Misrata, y de hecho la embarcación tuvo que partir rápidamente por los riesgos que se corrían.
Ello dificultó a su vez la selección de los tripulantes. "No pudimos llegar a los más vulnerables, aquellos que necesitan salir con más rapidez, porque era demasiado peligroso", relata Haslam.
Algunos de los migrantes llevaban varios días refugiados en el puerto de Misrata, y estaban tan desesperados que los cooperantes temieron una estampida si intentaban sacarles del barco --el 'Ionan Spirit'-- en el momento de subir.
Muchos de los migrantes son bangladesíes y egipcios, pero también hay sudaneses, sirios, iraquíes, tunecinos e indios, entre otras nacionalidades. Al llegar a Benghazi se montaron en los autobuses que les llevarían a un campamento de tránsito, de cara a trasladarse hasta la frontera con Egipto. Buena parte de estas personas son originarias de otras zonas también en conflicto, lo que supone otro obstáculo para su vuelta a casa.
La OIM confía en que el 'Ionan Spirit' pueda volver pronto a Misrata para recoger a un nuevo grupo de personas, pero para ello requiere cinco millones de dólares (3.400.000 euros aproximadamente).
El personal de esta agencia advierte además de que muchos de los migrantes presentan síntomas de malnutrición y deshidratación, así como otros problemas de salud. "Sin acceso a agua limpia, buena nutrición y refugio, atención médica, algunos de ellos morirán", pronostica Haslam.
Este comenta que algunos libios han preguntado al personal humanitario sobre los costes de alquilar una embarcación con la que huir por su cuenta.
