MADRID, 29 (EUROPA PRESS)
Los manifestantes en contra de la reforma del aborto en Polonia, que prácticamente prohíbe la interrupción voluntaria del embarazo, han tomado las calles del país por tercer día consecutivo, después de la publicación oficial de la nueva normativa.
Las protestas, registradas en Varsovia, Gdansk, Cracovia, Breslavia, Katowice y varias localidades de población más reducida, comenzaron el 22 de octubre, cuando el Tribunal Constitucional dictaminó que el aborto por malformaciones fetales graves, como enfermedad o discapacidad, es contrario a la Constitución. La ola de indignación y movilizaciones, lideradas por el movimiento Huelga de Mujeres, cumple este viernes cien días.
En Varsovia, la capital, la protesta ha comenzado en la rotonda Dmowski, que los manifestantes han rebautizado como rotonda de los Derechos de la Mujer. La Policía, que ha pedido a los asistentes que regresen a sus domicilios, ha cortado varias calles de la ciudad y, en un momento dado, ha tratado de interrumpir la marcha. Los manifestantes, por su parte, han continuado por caminos alternativos.
Están ataviados con pañuelos verdes con el logotipo de Huelga de Mujeres y el lema "Aborto seguro, legal y gratuito". "Me temo que puedan hacernos retroceder aún más y endurecer la ley", ha señalado Martyna, una de las asistentes, al diario polaco 'Gazeta Wyborcza'.
"¡Su Gobierno será derrocado por mujeres!" o "pienso, siento, decido", han sido algunas de las consignas de las manifestantes en la capital, a donde han llegado varias personas procedentes de otras ciudades del país. Entre ellas, Joanna, una librera jubilada, quien ha celebrado encontrarse en la protesta porque, como ha reivindicado, "no puede ser que un tipo decida sobre los cuerpos de mis hijas y nietas".
Ante la multitud, que ha copado las calles causando cambios de rutas en el transporte y atascos, la Policía ha optado por cortar el paso y ha respondido a los enfrentamientos con el uso de gas lacrimógeno.
Según medios locales, se han vivido momentos "tensos" en la calle Marszalkowsla, cerca del Palacio de la Cultura y la Ciencia, donde la Policía ha frenado a un coche de las protestas y detenido al conductor.
En la misma vía, un niño ha tenido que ser atendido por una ambulancia al resultar afectado por el gas lacrimógeno que han utilizado las autoridades.
Por su parte, la Policía ha afirmado que también han recibido ataques con gas por parte de la marcha y que, al menos, dos agentes han requerido atención médica inmediata. "Reaccionaremos con decisión ante actos de agresión contra los agentes. Su seguridad también es importante", ha señalado la Policía de Varsovia en Twitter.
Durante la marcha también se ha llamado a acudir a la casa del líder del partido Ley y Justicia (PiS), Jaroslaw Kaczynski. Así, parte de la multitud ha conseguido entrar en el distrito de Zoliborz y han llegado al domicilio de Kaczynski a grito de "libertad e igualdad" con música y bailes. "En Argentina, las mujeres llevan años luchando por el derecho al aborto y lo han logrado", han declarado tres jóvenes que se encontraban en el lugar a la 'Gazeta Wyborcza'.
Finalmente, las protestas han llegado a su fin pasada la medianoche y con al menos cinco detenidos, uno de ellos un menor que ya ha sido recogido por sus padres.
Antes de finalizar la marcha, la líder de Huelga de Mujeres, Marta Lempart, ha llamado a los asistentes a volver a congregarse el próximo viernes y convertir las protestas en una "tradición".
EL FALLO
Un grupo de 119 diputados, encabezados por el partido gobernante Ley y Justicia (PiS), presentaron una demanda ante el Tribunal Constitucional en 2019, entendiendo que la legislación actual del aborto legaliza de facto la eugenesia.
La redacción vigente de la ley permite interrumpir un embarazo en caso de que exista una probabilidad muy alta, que no ocurrencia, de una discapacidad o enfermedad grave del feto.
La situación actual de la legislación sobre el aborto, conocida como "compromiso sobre el aborto", se estableció en 1993. Desde entonces, ni los partidarios de liberalizar la ley ni los defensores de restringir aún más el acceso habían tenido éxito en sus esfuerzos.
En 2019, el aborto por malformación del feto supuso el 97 por ciento de los 1.110 abortos que se practicaron en hospitales polacos. El síndrome de Down fue la justificación de más del 40 por ciento de los abortos legales practicados en el país el año pasado.
Actualmente, el aborto también es legal en el país si el embarazo pone en riesgo la vida o la salud de la madre, así como cuando es resultado de violación o incesto.
